El Rincon de las Hoces en Carrascal del Río

Muy tranquilo, cómodo, se puede ir con perro. Atienden muy amables y atentos. Se come muy bien en su restaurante.

Volveremos nos encantó el lugar. Habitación muy amplia y limpia, el servicio es muy amable y se come de maravilla. Lo mejor es que puedes venir con tu perrito, son uno más. Maravilloso sitio para descansar, visitar y hacer rutas. Volveremos nos han faltado muchas cosas por hacer!!

Ubicación inmejorable para conocer las hoces del Duratón. El dueño es encantador y muy amable. El personal es también muy correcto. Las habitaciones están bien, correctas para el precio decoradas de forma clásica y sin agradables. El restaurante tiene una cocina excelente. Es maravilloso que te dejen estar y dejar a tu mascota en la habitación!!

La cocina es algo de otro mundo, hasta raro por estar donde está… el pulpo, la hamburguesa, son otra cosa

Acabamos de llegar de pasar un fin de semana en este hotel, esta retirado de cualquier pueblo, es una pedania, pero muy bien situado para realizar las visitas de rigor por la zona, muy cercano a las hoces, a donde se puede llegar paseando y a Sepúlveda. Las instalaciones están muy bien, tanto el hotel como el restaurante, donde ponen el desayuno (en nuestro caso incluido en el precio de la habitación) y en que disfrutamos de un lechazo muy rico y con una carta interesante. Está situado justo al lado de un río, con una terracita para tomar algo, o cenar, en la que cuando cae el sol se está muy agusto ya que refresca debido a la cercanía de este. Para nosotros es un sitio en para repetir sin duda, aunque hay algún detalle a mejorar, que ya comentamos en recepción a nuestra marcha y que mejoraran seguro, viendo la atención con la que nos han escuchado.

¡Excelente en todos los aspectos!

Hemos estado una noche, mi marido, mi hijo de 14 años y yo. El hotel, correcto, reservé una habitación con cama supletoria porque éramos 3 personas e intenté que no fuese la habitación del baño con cuadros azules y blancos, ya que la bañera está debajo de la zona abuhardillada y hay que medir un metro quince para poder ducharse… para asegurarme incluso reservé la habitación que era apta para minusválidos, ya que no sería la de ese baño y… me tocó. Por lo demás, el check in era a las 14, intenté poder entrar antes y me avisaron que era imposible… llegamos a las 17, ya que aprovechamos para ir a comer y aún así tuvimos que esperar a que montasen la cama supletoria porque aún no estaba montada. Las sábanas de dicha cama olían a chimenea, sí… a chimenea… y, esto ya no es culpa de local, la habitación de al lado tenía una pareja extrañísima que gritaba de manera terrible y no pudimos dormir hasta las 5 de la mañana, además de tener la tele encendida toda la noche… en general, una experiencia para olvidar.

Acogedor y auténtico hotel español en una zona preciosa. Propietarios y personal muy amables, habitaciones bonitas y limpias. Se admiten perros. Buen desayuno y platos del menú del restaurante. Nos alojamos dos noches viajando desde el sur de España hacia el norte. Hicimos un precioso paseo junto al río con muchas zonas de sombra, lo cual fue muy grato. Recomiendo este lugar.

Reservamos para comer. El cordero, el cochinillo y la torrija, riquísimas.

Hemos estado este fin de semana en El Rincón de la Hoces y sólo tenemos buenas palabras. Desde la llegada ya se nota que has acertado. El trato del personal es exquisito. Las habitaciones espaciosas, limpias y muy cómodas. La zona es genial, ya que desde la misma puerta puedes hacer rutas como la de las hoces del Duratón que es una pasada. Hemos comido y cenado allí todo el fin de semana y nos ha encantado, desde el chuletón a la cecina, pasando, como no, por el lechazo, que lo hacen de lujo. Además hemos ido con nuestra perra con la cual nos han permitido ir a comer y cenar, cosa que no ocurre en todas partes. A todo esto le puedes sumar una terraza para tomar una cerveza fresquita con el murmullo de la presa. No quiero terminar sin mencionar también el trato de TODO el personal que ha sido muy cercano y cariñoso. A pesar de ser un trabajo duro y poco grato en ocasiones, lo han hecho siempre con una sonrisa. Hacéis un gran trabajo. Volveremos!!! Gracias por todo.