El Obrador de Pasta en Sevilla

El mejor café de todo el barrio. Trato genial y todo está riquísimo, muy recomendable

de lo mejorcito del barrio. Todo lo que hay es exquisito. Mi favorito son los espaguetis negros, pura delicia! Tienen además un espacio muy agradable por si quieres quedarte ahí a comer

Encontrado por casualidad paseando por las calles de Sevilla, este lugar fue un grato descubrimiento. La camarera muy simpática y amable nos sirvió sus empanadas con una sonrisa en el rostro. El mostrador ofrecía una gran selección de productos, todos ellos elaborados a mano. Nos dieron las empanadas, una de cada tipo, y todas estaban deliciosas. La tarta rústica también es muy buena. Precios honestos.

Buena comida, buen ambiente y un trato excepcional. Las pastas frescas rellenas son impresionantes todas. Toda la comida está hecha con cariño y eso se nota.

Un sitio magnífico, los productos son estupendos

Se trata de un lugar muy refinado y selecto cuando uno lo ve a simple vista. El obrador de Pasta es un claro ejemplo de estilo, delicatessen y buen gusto. Cuando vimos el local por primera vez y desde fuera este lugar nos sugirió una parada detenida por varias razones. En primer lugar, por la calidad de sus productos bio que mantienen con sumo esmero desde primera hora de la mañana como nos comento la dependienta. Esto quiere decir, que todo lo que ven es plenamente fresco y de elaboración propia. Y por lo que hace a la segunda, es la amplitud de las exquisiteces que por un precio más que aceptable uno puede adquirir y verse inmerso, listo para volver a repetir. En nuestro caso, nos decantamos por una empanada de pollo asado que en cuestión de segundos nos la calentaron para tomar y para llevar en su horno. Punto reseñable, además de todo lo antes dicho, es la gran variedad de salsas para nuestras pastas sin lactosas que ya están preparadas para consumir y llevarlas a casa, estoy hablando que uno puedo comprar el mismo local estas para consumo propio. La idea es más que acertada, genial y además de práctica. El propio local queda compuesto por una gran mesa de madera por si alguien quiere in situ degustar todo lo allá compra y donde pasar un buen rato para la lectura y comida. Desde la calle podemos ver el mismo obrador donde la dependienta trabaja las pastas que van a ser servidas posteriormente en la propia zona comercial y donde quedan expuestas todas estas delicatessen. Nosotros no pudimos pedir más. La experiencia fue más que satisfactoria. Volveremos a probar alguna más!!! Cómo dato añadido, compramos pasta fresca rellena preparada para cocer y sazonar con salsas ya preparadas para llevar. Opciones tan deliciosas como la mezcla de espinaca, parmesano y ricotta o tomate fresco y queso de cabra!!! No dejen de visitarla. Muy Recomendable y atención del servicio genial.