Doppietta en Barcelona

Originalmente habíamos planeado cenar en Benzina, recomendado por el hotel. Nos acercamos por capricho y, por desgracia, nos topamos con que no había mesas disponibles. Sin embargo, la amable anfitriona nos recomendó el restaurante hermano Doppietta, justo al lado. ¡¡¡Totalmente de acuerdo!!! Al principio, un poco decepcionados porque nuestro plan original no hubiera funcionado, Doppietta nos compensó con creces. Un ambiente maravilloso y una atmósfera estupenda. Pero lo que realmente hizo nuestra velada inolvidable fue el servicio de Gianluca. Con su naturalidad y su amplio conocimiento de los platos, nos guió a la perfección durante toda la velada. A veces, eran los pequeños detalles de su servicio los que marcaban la diferencia en comparación con muchos otros restaurantes. Servicio proactivo, atención al detalle y una atenta observación de sus comensales. El plato de aperitivos para dos fue un punto culminante culinario. Una cuidada selección de embutidos y quesos italianos, la mayoría aptos para embarazadas, nos impresionó por su calidad y sabor. El vitello tonnato también estaba excelente. Como plato principal, compartimos tres platos de pasta: la clásica carbonara, los casoncelli de calabaza y los tagliatelle ragú de Mamma Luciana. Nuestra conclusión: un restaurante de ensueño. La combinación de comida de alta calidad y el servicio de Gianluca hicieron de nuestra visita a Doppietta una experiencia inolvidable.

La pasta no se puede escoger ni repetir. Precio alto para la calidad recibida

Todo muy rico, sobretodo el postre de la casa con helado de canela, es un lugar para repetir. Además nos atendieron enseguida y fueron muy amables en explicarnos la carta.

Excelente servicio, buenísima comida y precioso local. Nos ha encantado. Pero sobretodo destacar la atención recibida por parte de todo el staff

Una mezcla perfecta entre sabor auténtico, estética que grita cool y una carta con cero miedo al placer. Fui por curiosidad y me quedé por las croquetas. Crujientes, cremosas, adictivas… básicamente, un escándalo. Y el vitello tonnato… mamma mia. Suave, sabroso, perfectamente equilibrado. Una declaración de amor servida en plato frío. Ideal para cenas con amigas, citas con potencial (o sin) y cualquier excusa para comer bien y posar con una copa en mano. Mención especial (y ovación) para Luca, atento, simpático y con ese toque de savoir faire que convierte una cena en experiencia.

Toda la experiencia fue realmente más de lo que esperaba. Fui al brunch del domingo, todo estaba realmente delicioso y de alta calidad. El servicio fue puntual y atento.

Fuimos a comer 6 amigas haciendo el menú de buffet de primero y los segundos en mesa. El buffet espectacular, variado, de calidad y riquísimo. Nos pusieron en una mesa la zona de arriba y fuimos bien atendidas. Es cierto que es mucha cantidad y acabamos bastante llenas. Recomendable.

Estuve allí un sábado por la noche. Hubo música en vivo y el ambiente perfecto. Volveré porque la comida también estuvo buena... y soy italiano :)

Una agradable sorpresa. Comida italiana de verdad. Nos recomendaron un vino blanco italiano muy bueno. El Tiramisú fantástico. Todo esto en un ambiente agradable y un personal muy atento.

Increíble descubrimiento! Con 30€ puedes disfrutar de un enorme buffet con todo tipo de charcutería italiana, quesos, focaccia, mozzarella, ensaladas variadas. Luego te traen a la mesa 5 platos diferentes: arancini italianos, risotto, pasta con calabacín y tomillo (mi favorita!) y una carbonara, luego porchetta y patatas al horno. Para acabar puedes elegir entre varios tipos de postres italianos o café. La bebida también está incluida, tomé un buen Aperol Spritz. Como italiana puedo decir que la calidad de todos los productos es excelente! Súper recomendable. Volveré! Grazie🫶🏼