Doña Encarna en Córdoba

Es la tercera vez que he elegido este rtte. Para comer y la que más me ha decepcionado 😞. La comida, con excepción de las croquetas, toda excelente. El servicio, en cuanto a amabilidad y empatía, aprobado con buena nota, pero con más empeño que profesionalidad. Menos mal que conseguimos, a mitad de la comida, la atención de Rafa. Para el que doy un notable alto. Lo más lamentable es la falta de previsión y organización de los responsables o beneficiarios: No se pueden aceptar reservas cuando no dispones de medios para atenderlas. Ello lleva en primer lugar a indisponer y saturar a un personal, poco cualificado, por sobrecarga de trabajos. Seguidamente a lo anterior se origina la incomodidad, e incluso malestar, de los clientes. Y la peor consecuencia es el descrédito de un magnífico restaurante, con muy buena cocina y una gran tradición en esta ciudad. Os animo a mejorar.

He venido dos veces y no sé cómo no he venido antes, la comida buenísima, el churrasco exquisito. Y mi hija la más feliz del mundo con la animadora, nosotros comemos tranquilos. Lo tiene todo la verdad.

Ideal!! Para ir en pareja o para ir en familia, porque nosotros coincidió música en directo de un saxofón y encima con cuidadores para niños. Y por su puesto añadimos a todo esto que el precio y la calidad de la cena y la atención estuvo de 10. Lo recomendamos 100% y esperamos volver pronto.

Me ha gustado mucho el sitio: buena terraza, personal muy amable, comida deliciosa y una zona para que los niños jueguen con una monitora e incluso cine. Probamos la mazamorra, ensaladilla de marisco, churrasco y puntas de solomillo con salsa verde. Todo muy recomendable. Calidad precio muy bueno. Como curiosidad tienen espetos.

El camarero Javi, EXCELENTE,🤩🤩.

Inmejorable, Javi es maravilloso camarero

Buen sitio para disfrutar de su terraza y de su comida en buena compañía.

Amplia Carta y sobretodo espetos y carnes a la brasa. Buena comida casera tradicional cordobesa.

Cené hace una semana en este restaurante. Voy a valorarlo por partes. Primero la ubicación, es muy buena y se agradece un parking interno gratuito. Reconozco que por fuera esperas que el lugar sea algo más estético en cuanto a terraza, aún así, un mesón de barrio periférico muy amplio y con muchísima cantidad de clientes. La atención al cliente fue inmejorable, principalmente la recibida por una camarera con moño super simpática que estaba muy atenta a nuestra mesa. Destacar que para los niños tienen una zona de cine de verano gratuito, en este caso estaba pepa pig. Lógicamente con muchas mesas alrededor, aunque con una correcta separación, no sé puede establecer como un lugar tranquilo, y desgraciadamente es incómodo si te toca algún fumador en la mesa de al lado.. Calidad precio algo mejorable, pero soy consciente de que cocina estaría algo saturada, así que no se tendrá cuenta el orden de platos. Patatas revueltas con gulas, un plato considerablemente grande y muy rico, escasez de gulas, pero aceptable. Churrasco con roquefort, la brasa algo pasada en algún trocito, buena textura y sabor, exceso de grasa en el trozo que me tocó, y el roquefort con un sabor suave y bastante líquido, pero estaba bueno. Puntas de solomillo a la pimienta, la carne muy buena, jugosa, en su punto y riquísima, la salsa demasiada pimienta, pero correcta. Las aceitunas estaban muy muy ricas, muy caseras, con un aliño muy conseguido. Y el postre, no entiendo por qué ponía tocino de cielo en la carta, era pudding con nueces, pero de lo mejorcito, casero, dulce, riquísimo. Por lo demás no tendría inconveniente en volver a comer aquí, aprobado

Estuvimos para almorzar, pedimos un revuelto de bacalao y unas carrilleras. De postre pedimos tarta de Kinder y un café. En total, junto con los dos refrescos, pagamos 37,20€. La atención fue muy buena, el camarero fue muy cercano y buena gente, además hacía mucha calor y nos regaló dos sombreros. Los aseos estaban muy limpios. Está muy bien ubicado, a pocos minutos de Medina Azahara. Así que es una muy buena parada antes o después de la visita.