Cuando Sali de Cuba en Madrid

Muy buena atención y excelente sabor de la comida 🇨🇺🤍

De los mejores cubanos que he ido. Calidad precio muy buena. Además fuimos con una cubana y pedimos 3 platos para 4 y algo para picar. Suficiente. Los mojitos muy buenos. Hemos cenado fritura de malanga, dos platos principales güajiro y camagüellano. Todos de lujo. Que pena q solo tengan cristal y no Bucanero. Los mojitos excelentes

Si estas en madrid y quieres comer como en casa ,este es el lugar .

Estuve en el restaurante "Cuando sali de Cuba" y me encantó la comida todo estaba muy rico, lo único que no me gustó fue el mojito de la yuca hervida, te ponen un cuenquito con aceite y ajo picado. Cuando lo que se tiene que hacer es dolar el ajo en aceite y echarle sumo de naranja agria y echárselo por encima a la yuca, sencillo y muy delicioso. En general todo estaba muy bueno, y delicioso. Recomendable para disfrutar de comida cubana. Un cordial saludo Tomás Dafonte.

Comida abundante y bien de precio, aunque, para mi gusto, a algunos platos les falta un poquito más de sabor...pero en general, diría que bien

Comida muy rica , bien confeccionada y como siempre que voy una atención magnífica

Si te apetece disfrutar de un auténtico sabor cubano en Madrid, te recomiendo totalmente Cuando Salí de Cuba. Su ubicación es perfecta y muy accesible, así que no tendrás problema para llegar. La carta es amplia y llena de sabores increíbles; cada plato está preparado con esmero y se nota en cada bocado. Los precios me parecieron muy justos para la calidad que ofrecen, nada exagerado, y además aceptan tanto pago en efectivo como con tarjeta, lo cual se agradece. Eso sí, está tan de moda que conviene reservar con antelación. El ambiente es super acogedor, ideal para desconectar después del trabajo o para ir en familia. Tienen una terraza interior preciosa donde se come tranquilamente. Si quieres hacerte una idea, échale un vistazo a su Instagram: ¡ver esas fotos te entrarán ganas de ir inmediatamente!

La comida tiene buena calidad: nada espectacular, pero tampoco mala, simplemente correcta. Las porciones son muy pequeñas; como hombre me quedé con hambre. La persona en la barra no fue nada amable. Como cubanos, sentimos que esta no es la experiencia de hospitalidad que deberíamos mostrar. La comida estuvo bien, pero el servicio dejó mucho que desear y, por lo que pagas, no vale realmente la pena.

Todo muy rico. Bien cocinado. Los torreznos (Chicharrones cubanos) SUPERBUENOS! El tamal muy bueno! Solo una pequeña sugerencia: En el menú del día, el plato ppal viene acompañado de arroz blanco y ensalada; considero que podían agregar, de manera opcional, un pequeño pozuelo de frijoles negros, como un extra que se pague a un precio módico, 2€, por ejemplo. Creo que sería muy positivo y no creo que perjudique al restaurante. Éxitos!!

Cuando nos apetece disfrutar de auténtica cocina caribeña, este restaurante es siempre una apuesta segura. Su ubicación, en pleno centro de Madrid —entre la Puerta del Sol y la Plaza de Callao— lo hace muy accesible, aunque conviene ir a pie, ya que se encuentra algo escondido entre las calles del corazón de la ciudad. El local es amplio y respira Cuba por cada rincón: la decoración evoca con acierto la calidez y el colorido de la isla, creando un ambiente acogedor y genuino. La carta fiel a la tradición culinaria cubana, con una variedad que invita a volver para seguir descubriendo nuevos sabores. En esta ocasión, optamos por unos Plátanos Maduros fritos, una Santiaguera y arroz blanco como acompañamiento. El resultado fue excelente: sabores bien logrados, sabrosos y auténticos, que evocan el paladar cubano como si uno estuviera comiendo en una casa particular de La Habana o Santiago. El servicio, como en anteriores visitas, fue muy amable y atento, lo que suma al disfrute general. En cuanto a la relación calidad-precio, resulta más que razonable, sobre todo considerando el nivel de autenticidad de la propuesta gastronómica. Un reconocimiento especial al equipo de cocina, cuya labor muchas veces permanece en segundo plano, pero es clave para transmitir con fidelidad la esencia de la cocina cubana. Mi enhorabuena a esos cocineros y cocineras que, desde los fogones, nos regalan un pedacito de Cuba en cada plato.