CP8 en Cartagena

La comida estaba buena pero para el precio que tenía (ensalada y caldero) era bastante escasa...

Tiene unas vistas a la bahía muy chulas, un ambiente muy marinero y de deportistas. Comimos un arroz a banda y de tapas marineras y chopitos. Todo muy rico y los camareros muy amables. Dejan traer perritos.

Un lugar súper recomendado la atención y la calidad por parte de Aron fue excelente,la ubicación perfecta al lado del mar.

Un sitio fantástico en un entorno precioso como es Cabo de Palos. Después de competir en padel Surf (Enhorabuena a SupchallengeCabodePalos!) fuimos a recuperar fuerzas con ilusión! No conocía el restaurante y me encantó! Muy buena cocina y servicio! Fuimos 3 adultos y 3 niños! Pedimos Almejas al Ajillo (los peques nos dejaron probar una!), camarón (gamba cristal) frita (muy rico!), Arroz CP8 (con Atún, gambó y chipirón todo en On!). Los peques; lágrimas de pollo (pero de verdad y con las patatas hechas por ellos) y mi hija un rodaballo! bueno, bueno! Luego hablamos con Jose de la comida, del restaurante, de futbol y de valores!! (un regalo) con ganas de probas más cosas y de seguir conversando! Ya tengo excusa para volver al mar! a repetir!

La la ternera estaba riquísima y hecha exactamente hasta el punto que pedimos, la guarnición también perfecta y al postre le pongo un 9+. Un sitio muy recomendable, con el personal muy amable, volveremos para probar otros platos.

Precio caro. Pagas la terraza, las vistas el servicio y la comida.

Nos presentamos sin reserva y Jose A, nos dió de cenar estupendamente con unas vistas espectaculares. Buenos consejos culinarios y todo estupendo y riquísimo. Las almejas espectaculares!. Se notaba que eran Gallegas. La escalivada con su salsa romanescu casera, increible! Se nota que los platos se hacen elaborados y con gran esmero. Todo un descubrimiento. Sin duda, volveremos! Excelente.

La comida muy buena, el tiempo de espera, horrible. La camarera solo llevaba de un lado para otro los carteles de “reservado”, muy perdida, nos cambiaron de mesa dos veces. Teníamos reserva a la 13:30, nos tomaron nota de la bebida a la 14:03 y no nos sirvieron hasta las 14:20, momento en el que tomaron la comanda. En lugar de advertir del tiempo de espera del arroz, no nos dijeron nada y acabaron sirviéndolo a las 15:25, aunque los entrares los sirvieron a las 15:00. No considero que sea tiempo de cocina, sino más bien la poca organización de los camareros, que en una ocasión trajeron bebidas que no eran nuestras y finalmente la cuenta de otra mesa.

Hemos ido a este restaurante por los buenos comentarios que habíamos leído, pero lamentablemente la experiencia no ha sido así. Una pena que no hayamos disfrutado de la comida, que sí estaba buena, por el mal servicio de camareros. Había una camarera que no hacía más que estar paseando, habiendo llegado a reclamar una coca cola y un agua hasta cuatro veces, entre plato y plato casi podías hacer la digestión. Eso sí, para traer la cuenta y esperar a que paguemos han sido rapidisimos.

Comida riquísima, atención de 10 y situación excelente. Hemos estado ya dos veces. La primera fuimos con niños y la atención fue buenísima y la siguiente pedimos un arroz de cp8 para llevar. Nos la dejaron con un poco de caldo de más para que cuando reposara no se quedase el arroz seco ...estaba riquísima Tiene variedad de comida para ir con niños, además disponen de tronas.