Cibus en Vallromanes

Fin de semana muy relajante, a parte del hotel que es muy bonito, tiene el spa Aire enfrente, donde te permite desconectar de todo.....experiencia para repetir

Hemos cenado en el restaurante Cibus. Platos exquisitos, atención inmejorable y un ambiente estupendo. Tras un servicio espectacular por parte de Rosa (muy destacable por su simpatía y atención al detalle) y el coctelero (no recuerdo su nombre, pero no olvidaré los corazones en mi exquisito Expresso Martini), no nos queda más que agradecer la velada. Al acabar una cena genial, finalizamos con copita al aire libre, bajo un cielo estrellado. Volveremos, sin más tardar el próximo sábado. Gracias por todo.

Excelentr hotel ! Ideal para una escapada , algo elevado el precio pero para una ocasión especial merece la pena. Todo muy cuidado, ha recibido en varias ocasiones premios por su respeto al medio ambiente y reducción de huella de carbono, que puedes apreciar en diferentes aspectos de tu visita. El entorno es precioso y recomendable para hacer las diferentes actividades q se proponen en o sencillamente para pasearlo. Silencioso y tranquilo Dos restaurantes para apreciar una gastronomía especial. Posibilidad de combinar con actividad en Aire, en las mismas instalaciones. Todo limpísimo y la atención impecable. Piscina exterior con vistas

Una pena las habitaciones, el colchón es de mala calidad, así como las almohadas. No hemos podido descansar bien, te despiertas con dolor de espalda. El resto un 10, servicio, buffet, el balneario Aire, todo perfecto.

Lugar tranquilo, habitaciones limpias y con todo lo que necesites, las vistas preciosas. La cama grande y cómoda. La atención de los trabajadores de 10, en recepción muy amables y profesionales, tengo que felicitar a Eva que es con la que más me comuniqué y su ayuda sobrepasó expectativas, lo hizo muy fácil. Gracias.

El hotel guapísimo y en una zona privilegiada. Además, tener el Aire al lado es genial. Siempre hemos ido a su restaurante pero el otro día nos quedamos a dormir para hacer algo más de “fiesta”. Me decepcionó mucho que todos los trabajadores me hablaran en castellano, pese a hablarles en catalán. Yo venga hablarles en catalán, y ellos no había forma de que cambiaran el registro. La chica que dirigía el desayuno (rubia y joven) incluso ni nos entendía, y era de aquí seguro. Otro incluso me dijo cortando, no entiendo señora lo que me dice. Muy decepcionante que un entorno catalán, o al menos así lo entendía yo todas las veces que habíamos hecho Aire+restaurant, no tenga un requisito mínimo de que trabajadores que atiendan al público sepan hablar catalán.

Hotel 5 estrellas. Se las merece todas. Para mí gusto el personal es demasiado atento, pero no veo que eso pueda ser una pega. Repetiremos!

Un sitio magnífico para relajarse y disfrutar

El sitio es una perla escondida y la comida fue muy buena. Lo unico que el restaurante esta montado como si fuera un comedor de una granja con mesa de madera y mantel de papel, una pena por lo rico que esta la comida. El maitre pero nos acomodo a una mesa muy linda y fue un toque muy gentil. El personal joven falto de algunos detalles como traer la comida sin el agua en la mesa pero no importa, lo unico que nos fastidio un poco es que la chica morena con gafas nos trajo todos los platos a la vez cuando habiamos pedido en dos pasos a otro camarero, y al comentarselo nos dijo con un poco de arrogacia que los cocineros se van a las 22.30, que no creo sea verdad para una cocina de ese tipo. Pusieron el arroz en caliente y lo trajeron despues quitandole la capa de arriba que evidentemente se habia secado, non causo gracia de que quisieron pasar de listos asi. Igualmente estaba bueno asi que los cocineros muy buen trabajo, servicio menos.

Sin comentarios sobre la comida, todo espectacular. El sitio también es muy bonito, aunque había bastantas moscas. El único pero es el servicio, demasiado rápido en venir a pedir (apenas 2’ des de que nos traen las cartas) y más lento en servir. Además la camarera no te entendía en catalán.