Casa Tomás en Alcalá de Guadaíra

Como siempre Tomás y Artemisa hacen de cualquier día un momento inolvidable. La comida exquisita, el servicio excelente y el ambiente excepcional, pero lo que define mejor este restaurante es que te sientes como en casa. Gracias por cada momento

El cochinillo está fenomenal, las migas magníficas, el atún, los postres etc...

La comida estaba espectacular, claramente todo casero y muy bien presentado. Recomiendo probar el paté de perdiz, las tagarninas esparragás y paletilla de cordero lechal al horno de leña, buenísimos. El trato muy amable y acogedor y el lugar muy agradable. Sin duda tenemos que volver a probar otras cosas. Muy recomendable

Ir a Casa Tomás es una experiencia en sí misma. Acogedor, cómodo, precioso y peculiar. Interesante. La comida es espectacular, tratado con mimo, lento y de manera consciente. La atención del personal es sin duda la mejor que me he encontrado desde hace mucho. Es como si te recibieran en su casa. Comer en Casa Tomás es un deleite en todos los sentidos. Gracias ❤️❤️

Trato espectacular, comida todo buenísimo, el servicio muy atento y el ambiente inmejorable. Tiene una decoración muy chula. Volveremos

Un lugar muy agradable y singular para ir con la familia. La comida es de mucha calidad y el servicio muy atento.

Todo espectacular ...sitio como hoy buenísimo trato mu bueno comida rica...y decoracion .poco visto y muy acogedor..presiosi y un dia buenisimo

Lugar hospitalario, tranquilo y trato personal exquisito, con platos caseros y paladar formidable.

Relación calidad-precio buena... con un pero: la cantidad de las carnes resultó algo justa, teniendo en cuenta el precio (no es un sitio barato, aunque tampoco se puede decir que sea caro). Sin embargo las migas vinieron en una ración generosa, y estaban buenas, con guarnición también generosa y variada. Ambiente y decoración agradables, servicio rápido, amable y eficiente.

Nos encanta Casa Tomás por su comida y ellos son todos muy atentos. El cochinillo y el cordero de los mejores q he probado nunca.