Casa Montalván en Sevilla

El sitio es muy bonito, y la comida está súper rica, pero una de las camareras no tiene muy claro lo que es el servicio al cliente, tuve que pedirle 3 veces una botella de agua, y hacía caso omiso de mi pedido, de hecho mi compañero tuvo que ir hasta la barra para pedir la botella, de verdad deberían instruir más a su personal del servicio al cliente a los turistas pues no lo tienen muy claro

Muy buena calidad en la comida, el servicio un poco deficiente, los camareros muy amables pero le faltaba formación tuve que pedir varias veces una botella de agua, el lugar muy bonito pero pedí la reserva en el patio y aunque me pusieron en el patio fue bajo un techo de hormigón

Bonito restaurante con una carta de platos tradicionales y una presentación sin muchas pretensiones, pero todo lo que probamos estaba muy bueno.

Pasé por el restaurante durante el día, no por el bar, y un lugareño me recomendó que la comida era excelente. También quería disfrutar del interior, decorado con cerámica antigua. Cuando llegué por la noche, sobre las 22:30, me dijeron que el restaurante del hotel estaba cerrado y me ofrecieron sentarme en la barra o subir a una azotea. Decidí subir. Me decepcionó un poco, con un diseño muy simple, diferente a lo que vi durante el día. En fin, me quedé y probé la comida y las bebidas. La comida estuvo buena; pedí una ensalada de queso de cabra con miel y un filete. Si volviera, me aseguraría de preguntar cuándo abre la parte principal para poder disfrutar de la historia y la decoración; de lo contrario, la comida es demasiado cara para una simple mesa en la azotea de un bar. Adjunto fotos de lo que vi durante el día.

Comida rica pero queríamos entrar en el restaurante para conocer la reforma del edificio que ha sido premiado y como no habíamos reservado no nos dejaron entrar, a pesar de haber mesas libres.

Una terracita con buena atención y cocina.

Sitio muy bonito y peculiar, antigua fabrica de cerámica. Distintos salones y ambientes para disfrutar de la comida. Sitio cuidado y decoración bonita, típica y especial. Las comida cuidada y deliciosa. Muy recomendable los postres. Personal atento y amable.

Fuimos a cenar. Las tapas estaban riquísimas y la atención perfecta

Un sitio precioso, con un ambiente agradable y buena comida .

El lugar es muy bonito y el camarero fue especialmente amable. Las tapas son muy buenas y refinadas; recomendamos las croquetas de cordero y pollo, así como las de atún. Este fue nuestro restaurante favorito durante nuestra semana en Sevilla (con una excelente relación calidad-precio).