Casa Mató en Barcelona

Buen lugar para beber unas cervezas, pero no más porque es un poco caro 🙂

Terraza muy agradable, ambiente tranquilo para una cena relajada y sin prisa. La comida buena aunque las raciones un tanto justas por el precio. Trato muy amable y profesional. Recomendable y para volver.

Bistró Mató es un lugar realmente excepcional. ¡La comida es increíble! Pedimos bacalao, un sabor tan sutil y refinado que es imposible olvidarlo. Y las alcachofas con jamón nos transportaron al instante a aquella primera visita, cuando descubrimos este plato. El steak tartar estaba simplemente divino: textura, sabor y presentación perfectos. Cada plato era una experiencia inolvidable. El interior también es genial: un salón elegante y acogedor, en el que nos sentimos muy a gusto la primera noche que conocimos este restaurante. Disfrutamos mucho del ambiente. Pero, por desgracia, hay un "pero" importante: el servicio. Reservamos una mesa en la terraza con antelación, pero nos sentaron dentro sin darnos explicaciones. La primera vez que lo disfrutamos, el salón era realmente precioso. Sin embargo, cuando decidimos tomar un vermut antes de irnos, después de la cuenta, salí y me senté en una mesa libre, ¡diez minutos después! El camarero se me acercó y me pidió bruscamente que me levantara. El motivo es "esperábamos clientes", pero después de toda nuestra estancia en la terraza, nadie apareció. Entendemos todo: restricciones, reservas, ¿un flujo de clientes a las 22:30? Pero no hablamos de algo imposible, solo un poco de flexibilidad y participación. Cuando los clientes piden que los cambien a una mesa libre para simplemente disfrutar del frescor nocturno de Barcelona y del ambiente, no debería causar tensión. Son un lugar maravilloso. Vivimos cerca y sin duda volveremos. Pero por favor, presten atención a la formación del personal: estén atentos a los clientes, escúchenlos y no tengan miedo de llegar a un acuerdo, incluso en los pequeños detalles. Nuestro objetivo como clientes es disfrutar al máximo del ambiente y de las impresiones, y cuando se lo decimos directamente, no es un capricho, sino una invitación a hacer la velada aún más especial. Gracias por su cocina, su estilo y las emociones. Esperamos que nuestra propina sea una muestra de agradecimiento, no una compensación, y que la próxima vez todo salga perfecto. ¡Nos vemos pronto y que sea solo con emociones positivas!

En el primer momento, a pesar de reservar, nos costó un poco que nos atendieran y hicieran caso. Pero una vez dentro, un trato familiar y muy cercano. Buena situación, buena comida y buen ambiente. Las patatas son un gran atractivo puesto que tienen una forma peculiar de prepararlas.

Terraza súper agradable con un maravillo y amabilísimo staff

¡Excelente comida y mejor servicio! Una terraza estupenda para disfrutar en verano. Gracias.

Lugar inmejorable para tomar un aperitivo o una copa tarde noche. La comida muy basica y “vulgar”. El precio un desproposito para la calidad.

¡Una maravillosa experiencia en Barcelona, hermosa ubicación, excelente servicio y comida deliciosa!

La comida estuvo muy buena: carne, ensalada y pollo. El servicio de Dolly fue muy amable, así que es un excelente lugar si quieres comer algo rico.

Un clásico. Bien en todo. Vas a lo seguro. La terraza de la plaza está muy bien