Casa Goyo, España en Alcocer

No es la primera vez que vamos. Está vez íbamos con unos amigos que no habían ido nunca. La comida, genial. Como siempre. Pero hay escasez de camareros. El servicio de mesa ha sido lento. No teníamos prisa, pero en lo que me han traído mi plato y el de mis amigos, casi había terminado de comerme yo. Desde que hemos pedido la cuenta y nos la han traído, han pasado más de 20 minutos. Por lo demás muy bien.

Un restaurante con buena comida, muy buena atención y amabilidad.

Espectacular, platazos con grandes cantidades y muy bueno, recomendable para grupos, aunque nosotros fuimos dos y nos llevamos comida a casa, muy buen servicio y atención.

Un sitio estupendo para reunirte con los amigos a comer o cenar. La relación precio-calidad es buenísima. Las relaciones enormes

En general todo bien mis dos estrellas en Servicio es en especial dirigido a una mujer que debe ser dueña del establecimiento o similar por qué no va ni con indumentaria de hostelería que además de mal encarada y mal educada nos quita la carta de la mesa sin preguntar sin haber pedido la comida nos ignora cuando nos dirigimos a ella....una vergüenza, por lo demas e de decir que muy bien

Una pasada de restaurante, fuimos en el cumpleaños de mi mujer y tuvieron la cortesía de poner una nota de felicitación, más un pequeño regalo. La comida increíble, y los postres una pasada.....volvemos seguro, gracias por todo.

Espectacular comida , muy buena y mucha cantidad. La atención del servicio de primera. Muy recomendable

Mejor ir sin desayunar !!! Totalmente recomendable, Rodrigo, nos atendió muy bien!!!

Todo buenísimo y super abundante,el San Jacobo, mínimo tres personas para derrotarlo,menos mal que te dan tupper si sobra.Todo enorme,lo único la distancia,pero en la zona hay cosas que ver ,como la iglesia románica de Alcocer o ciudad subterranea de Brihuega. Si quieres probar varios platos lo ideal es ir en pandilla,ya que con un plato para uno comen dos. Seguiré yendo siempre,vale la pena,y el trato es genial,saben cuidar al cliente y como hacer que salga satisfecho.

El servicio fue un caos, cada vez nos atendía un camarero diferente. El primer chico que nos atendió nos quiso traer la carta casi una hora después de habernos sentado, evidentemente ya habíamos pedido a otro compañero suyo. Pedimos varios platos para compartir entre 6, la ensalada de melva estaba buena, las chuletas también, el entrecot no estaba mal, lo único la lentitud del servicio, vimos como mesas que se sentaron más tarde les servían antes, tardamos 2h y media en terminar de comer. Lo peor es lo que tardaron en llegar los platos del primero a los segundos, que prácticamente habíamos hecho ya la digestión de la ensalada. Me quedé con las ganas de pedir el típico San Jacobo de allí. De postre pedimos tocino de cielo (la verdad que habría pedido mejor el flan), tiramisú y leche frita, estos dos últimos riquísimos. Definitivamente para ir sin prisas y dejarse llevar por lo típico del lugar