Si el hambre llama a su puerta ve a Caperucita, está en la ciudad de Valencia, su ubicación no podía ser mejor.
Su menú es bastante amplio, según los críticos, aquí se cocina muy bien.
No te dolerá el bolsillo si decides venir, no es un restaurante caro y su comida y servicio merecen mucho la pena, tienen diferentes opciones de pago.
Es probable que se llene bastante durante el fin de semana, así que reserva tu mesa con antelación.
Su decoración invita a alargar la comida, aquí se hacen muchas reuniones familiares, es un restaurante que hace que quieras repetir una y otra vez.
En su Instagram encontrarás las fotos de sus platos.
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