Can Jepet en Setcases

Parada obligatoria en Setcasses. Restaurante con una comida espectacular. Facilitan alternativas a personas con intolerancias, cosa que es de agradecer. Un servicio muy atentos y agradables.

Había venido con mis padres años 70 cuando también era hostal para pasar la noche para esquiar a Vallter y hacer excursiones. Buen restaurante, ambiente familiar y buena cocina en un entorno magnífico. Fui con mi hermano después de subir Bastiments, día completo! Tuve que esperar rato (quiero comentar, porque teníamos mesa para las 3 y nos presentamos 3/4 de hora antes)

¿Cómo puede que en un restaurante no tengan azúcar blanco para el café?

Siempre que vengo a Setcases hago una visita a Can Jepet. Su cola de buey deshuesada, sin obstáculos, debo reconocer que me tiene el corazón robado. Bien ubicado junto al Ter, en un pueblo idílico, comida sin complicaciones pero deliciosos, rápidos en el servicio y entre plato y plato, un precio razonable, personal servicial que te hace sentir como en casa y una mención especial por la Cabeza de Sala, una persona con una cortesía y una educación que ya son difíciles de encontrar en todo el país. Silvia, eres genial.(ya se que no te gusta el halago, pero alguien te lo tenía que decir ;) En un país donde sentirte a gusto y bien servido en un Restaurante, empieza a parecer una misión imposible (sobre todo por la falta de personal), Can Jepet es la prueba de que el trabajo cuando se hace bien lleva a la felicidad, de restaurador y cliente. No suelo poner 5 estrellas en los Restaurantes pero en este caso me veo obligado a hacer una excepción, enhorabuena a todo el equipo.

Este restaurante es una auténtica joya. El trato del personal es sencillamente impecable: amables, atentos y con esa proximidad que te hace sentir como en casa. La comida es otro punto fuerte: platos tradicionales de montaña con un toque creativo, elaborados con productos de calidad y cuidadosamente presentados. Se nota el amor y dedicación con la que se cocina. Sin duda, un restaurante para repetir y recomendar sin lugar a dudas.

Restaurante catalán con un toque de innovación. Todo muy bueno, especialmente las croquetas. Los postres te vienen en un carro y son todos caseros. Muy recomendable.

Restaurante situado en el pintoresco pueblo de Setcases cerca de Camprodon y la estación de esquí Vallter. Buena calidad y servicio. Precio un poco elevado.

Hacía tiempo que queríamos ir, pero siempre olvidábamos reservar. Finalmente estuvimos el sábado. Mi pareja acaba de salir de un tratamiento de quimioterapia, no puede hacer grandes esfuerzos… pero sí disfrutar de una buena comida 🤭. El trato de la responsable de sala fue exquisito: amable, atenta y profesional al igual que el chico que nos sirvió. En lo personal, lo único que me decepcionó fue el Wellington (quizás me equivoqué en la elección, no soy muy de carne y tenía un sabor fuerte) y el coulant de galleta Birba, del que esperaba otra cosa. En cambio, el canelón, los pies de cerdo y el pastel de queso… ¡espectaculares! Me quedó pendiente probar el de chocolate y la Tatin, que tenían una pinta irresistible. Si vas por Setcases, es un restaurante que sin duda merece una visita.

En el restaurante Can Jepet disfrutamos de una experiencia excelente. El servicio es muy atento y cercano, haciendo que te sientas como en casa. El entrecot, servido en su punto, resulta tierno y sabroso, digno de destacar. Y por último, el tarta de manzana es espectacular, con un sabor casero y delicioso que redondea perfectamente la comida.

Servicio y comida insuperable. Totalmente recomendable.