Camprodon Hotel Restaurant en Camprodon

⭐️⭐️⭐️⭐️⭐️ Una experiencia mágica en San Juan Nuestra estancia en el Hotel Camprodon fue simplemente perfecta. Desde el primer momento, el trato fue excelente: al llegar, nos sorprendieron cambiándonos a una habitación superior sin coste adicional, un gesto precioso que marcó la diferencia. Todo estaba impecablemente limpio y cuidado, con una estructura preciosa que mantiene con orgullo su historia y esencia, pero a la vez con todas las comodidades actuales. Tuvimos la suerte de vivir un San Juan idílico, con unas vistas privilegiadas a la hoguera desde nuestra habitación. La piscina es espectacular, rodeada de jardines muy bien mantenidos donde se respira paz y belleza en cada rincón. El desayuno fue delicioso, con productos frescos y mucha variedad. Además, cuando pedimos un secador con más potencia para mi amiga, nos lo facilitaron sin ningún problema. ¡Así da gusto! El personal fue encantador, siempre atento, amable y dispuesto a ayudarnos en todo momento. Nos hicieron sentir como en casa, pero en un lugar de ensueño. Las vistas desde la habitación eran impresionantes y nos despertamos cada día con una sonrisa. Sin duda, hemos encontrado nuestro lugar para celebrar San Juan. ¡Volveremos cada año, toda la vida! Gracias por hacer de este viaje una experiencia tan especial. 💛✨

Hemos repetido varias veces en este hotel. Tiene mucho encanto y el trato es muy familiar y profesional. La zona del jardín con su piscina es ideal en verano y las vistas al puente de Camprodon son preciosas. El desayuno es muy bueno y para comer también tienen un menú muy recomendable. Sin duda, lo recomendaría.

Muy buena experiencia. Fui con la asociación de pensionistas y jubilados de La Sedeta. No podíamos estar mejor atendidos y eso que éramos 146 personas y con nuestras manías... El servicio es buenísimo. El almuerzo también estuvo muy bien.

Hotel con mucho encanto, restaurante clasico donde se coma muy bien, por lo general el sitio te lleva a otros tiempos, servicio exquisito.

Muy bien todo!! ¡Un Hotel con mucho encanto y la familia que le lleva muy atenta y agradable! Gracias por el fin de semana.

Estuvimos esta semana santa y la habitación un poco pequeña y bastante descuidada, necesita una renovación y especialmente el Colchón. Me levanté con dolor de espalda debido al colchón de muelles que tenía. Lo bueno fue el balcón con las vistas y el desayuno correcto.

El hotel tiene mucha solera, es muy bonito y está increíblemente bien situado pero las habitaciones que dan sobre la plaza tienen un problema importante con el ruido, toda la noche gente gritando y cantando porque al parecer es la zona donde sale la gente joven del pueblo con lo cual el descanso nocturno se convierte en misión imposible, así que os recomiendo reservar habitaciones con vista al río si queréis pasar una noche tranquila, creo que tienen un buen problema con este tema....

Hotel de estilo modernista, que te transporta a otra época, pero con las comodidades de hoy en día. Sus salones respiran mucha historia y las habitaciones, grandes y con camas confortables, hacen que la estancia valga la pena.

De aquellos hoteles que conservan la esencia y el estilo con mucho encanto. Trato muy cercano, perfectamente situado en el centro y el desayuno magnífico: combinando producto local y variedad de buena calidad. Para volver.

Lugar de época, coquetón con ambiente muy familiar. El desayuno es correcto, el yogur es local y vale mucho la pena 👌🏻 El responsable de la mañana, Roger es muy atento y servicial Gracias por la estancia