Cal Josetxo en Sallent

El menú Sidrería espectacular, los choricitos muy buenos y la tortilla espectacular. El Rey es el chuletón en la piedra, hacía mucho tiempo que no probaba una carne tan buena Volveremos seguro

Solo estuve de paso,pero es un buen lugar para comer

Atención muy buena y comida muy buena, 100% recomendable, y llamar para reservar que os podéis encontrar sin sitio

Paramos a desayunar pedí callos,muy buenos la verdad y abundantes té ponen una cazoleta para una persona que pueden comer dos 😀

Siempre nos ha gustado mucho ir está muy bueno. Nos encanta desayunar el morro de cerdo. Aunque la última vez estaba muy quemado y tenía sólo gusto a quemado. No se puede reservar mesa. El sitio está escondido, es cómo un polígono dónde hay una gasolinera.

Fuimos un grupo grande. El espacio es amplio pero nos pusieron en un rincón. Lo que pedimos era bueno. Entre otros, pedimos algunos txuletónes: es increíble el hedor de humo con el que salimos del local. Las losas de piedra calientes que llevan para que te calientes el corte hacen humo y éste no tiene por dónde marcharme... El otro inconveniente fue que nos dieron prisa porque nos dijeron q cerraban cocina antes de las 3... Por mi gusto, el precio correspondería con la calidad de la comida pero no con la experiencia en el local que tuvimos.

Muy bueno, parece mentira que para comer un buen chuletón tengas que ir a una gasolinera, jajaja

Hace años que nos conocemos. Antes tenía puesta una estrella por un feo que me hicieron los anteriores propietarios, estos de momento no me han hecho el mismo feo. El local en sí es encantador, es como un gran "chirniguito" en medio de una gran estación de servicio, pero muy bien construido, en obra, con buen diseño y mucho cristal, que no solo deja ver la cocina sino el exterior. Tiene una terraza encantdora y tanto puedes ver como cocinan la comida como la carne a la brasa. Además dispone de barra de bar, por si quieres algo más clásico y no ir especialmente solo a comer, sino a tomarte tu cervecita. Han mantenido la esencia de comida de los antiguos propietarios lo cual está muy bien, tchuletones que quitan el hipo (el otro día había uno de 2 kg), siguiendo la tradición de cocinártelo tu en la mesa con la brasa caliente encima de tu mesa. A parte de eso, buena variedad de comida, tanto pescado como buena carne a la brasa (probé el cordero y estaba riquísimo). Y también buena selección de vinos de varias DO, e incluso una buena sidra. Ofrecen menú sidrería y menú tchuletón a parte del menú normal, lo cual lo hace aún más interesante, eso si, si vas con más gente, porque uno solo no puedes acabártelo. En definitiva, lo recomiendo si vives por la zona, no expresamente para ir, lo que sí creo es que hay que reservar si quieres ir, porque no sé si aceptan comensales sin reserva previa.

Todo bien cocinado, servicio rápido, precio ajustado

He ido varias veces a comer el menú del medio día y la verdad es que es bueno, raciones generosas,calidad buena servicio muy bien. Si comes a la carta también muy bien. Solo una pega,pero es para todos los restaurantes,el chuletón que está muy bueno y muy recomendable,el acabarlo en la mesa,hace que todo se llene de humo y olor,pero es en todos los restaurantes. Muy recomendable