Cafetería Coronna en Santander

El sitio estaba bien , no tuvimos que esperar para una mesa , pero hacía un frío de la Hostia; tenían el aire acondicionado puesto a 19 grados , dijimos a la camarera que si lo podía subir de grados porque íbamos con un bebé de 6 meses y nos dijo que no podía ni apagarlo ni subir de grados … la verdad que una antipática de la hostia …

No tengo x costumbre contestar David, si se expresa tu opinión hay que hacerlo tal cual es, de todas formas como nos estresamos nos retratamos. Un saludo

-Buena ubicación, frente a una de las entradas de la playa de El Sardinero. - Carta con opciones de platos combinados, raciones, sándwiches, ensaladas y creo que alguna hamburguesa/perrito. - Precios razonables. - Servicio lento y dependiendo del camarer@ un poco áspero, a la hora de la comida tuvimos que esperar más de 1 hora hasta que tuvimos la comida en la mesa + la espera hasta que nos tomaron la orden. - Pedimos platos combinados, nuestra experiencia fue buena, ración abundante y calidad aceptable.

Es el segundo año que venimos a comer después de una mañana de playa y sin duda volveremos a repetir. El camarero de trenzas es súper amable y atento. Y la comida relación calidad precio muy buena y buena cantidad.

Hemos pedido un pincho de tortilla y doy fe que ha sido la peor tortilla que he comido en mi vida. Luego un bocadillo de rabas bastante bueno. El trato correcto y los precios también

Una de las mejores tortillas que he probado

Visite dos veces este cafe y las dos veces me fui encantado. La atencion de todos los meseros es espectacular. Me atendio un señor cabello negro de barba, no pregunte su nombre, pero su servicio fue muy especial, igualmente una muchavha de ojos claros, muy amable. La ubicacion es muy buena y tiene una vista muy bonita a la playa El Sardinero. Algo que me gusto mucho de este restaurante es que no te estan apurando para desocupar la mesa y nunca te llevan la cuenta hasta que tu la pides, sin meterte prisa. En Estados Unidos la costumbre es llevarte la cuenta tan pronto el mesero ve que terminaste de comer, lo cual yo considero una mal educacion. Mire como gente pedia un cafe y se estaba mucho tiempo disfrutando de la vista y el ambiente, eso me agrado y por eso regrese una segunda vez.

La impresión es regular, por decirlo suavemente, no muy buena. Los camareros son flojos, poco atentos. Pedí una tostada con jamón, me la trajeron sin jamón y esperé a que me la cambiaran. El jamón en sí no me convenció por su sabor y no tenía muy buena pinta. El precio de 6,1 por un café con tostada está por encima de la media.

La peor tortilla que he comido nunca en España.

Muy buen servicio y el chico que nos atendio David muy majo y gracioso un encanto.