Cafetaría Celtic Luada en Redondela

Gran lugar, la comida es muy rica, son muy amables y el servicio es increíble! Recomendado!!

Lasaña... ¡La porción es demasiado pequeña! Anuncian un descuento para peregrinos en la entrada, pero no me dieron ninguno. Me parece una estafa para atraer clientes.

La comida muy buena. Todo genial ☺️

Nos han tratado muy bien y han podido adaptar los platos para hacerlos sin gluten

Amable y honesto si pasas por Rendondela ven aquí a Celtic Luada

Cuando tu servidor puede hablar 4 o 5 idiomas... ¿cómo puede NO ser un buen lugar para turistas? :-)

Uno de los grandes avances de la humanidad y sociedad es el uso de la razón, compartir y transmitir en vida el interior puro, innato, sea cual quiera que sea, junto a sus seguridades, parte audaz, etc, también fallos, inseguridades, debilidades "miedos", avisos, alertas, humanos, normales, naturales, junto, delante y detrás el bien, fortalezas, aprendizaje, la existencia. Para acabar con, lo mejor y más saludable para confianza, paz, amor, vida, etc, tan ansiados y denostados, en estos tiempos modernos no solo camuflados, cobardes, artificiales, superficiales, materiales, mal fomentados, violentos, maleducados, de solo partes que interesan, aparentar, exteriores también humanos, lo que se puede, llega, ir y hacer de y lo contrario, etc, hay de todo en cada cual, de género, global, en cada ser, hay libertad y su parte buena sin duda alguna hay que saber, atrever, trabajarla, llenarla y sacarla. Haciendo, sintiendo, hablando, tratando, temas muy serios, necesarios e importantes, para sanar y purificar nuestras almas. Valiente, etc, aún falta un pequeño retoque de educación de generación en generación, incluyendo todo nuestro ser, como persona, para cambiar y no, cada cual, quienes sentimos, tenemos, más, menos, mejor, peor, poder sentimental sobre sí y las demás personas con las que convivimos, necesitamos, tiramos y hacemos la primera piedra de bien. No somos ni tan iguales ni tan diferentes y en esos pequeños, grandes, detalles, respeto y admiración común, está lo bonito, precioso, de y la vida.

De paso por el Camino de Santiago, paramos a cenar en este sitio para probar algunas especialidades gallegas. La tortilla estaba excelente, excepto la paella de marisco, que estaba demasiado pequeña y demasiado quemada. Se lo comentamos al pagar y fueron muy honestos: no pagamos la paella y se disculparon por lo sucedido. Una rareza hoy en día.

Nunca había comido paeja, pero terminé comiéndola allí y me encantó. El servicio fue muy bueno y el precio muy justo.

Excelente lugar, excelente comida, excelente servicio. Recomendamos Buen Camino