Bodega Cuatro Vientos, España en Murtas

Me alegro mucho de su reapertura, espectacular sitio, me siento como en familia.Cada visita que realizo mejor impresion me da, un gusto el trato la comida y sus instalaciones. Gracias a toda la familia Castillo, a Francisco Molina su enologo y a todos los colaboradores que con tanta profesionalidad desempeñan sus cargos. Gracias.

El sitio es espectacular, la comida muy buena y el servicio increíble, lo recomiendo 👌

un almuerzo maravilloso, cocinado con mucho amor

Lugar cálido y rústico, la comida es excelente, calidad y cantidad! Un sitio como los de antes, con la nota de un buen vino como acompañamiento y una fantástica visita por la bodega. El secreto súper sabroso y jugoso, y el acompañamiento de los platos riquísimo.

Fuimos la familia entera. Es sorprendente todo lo que han creado. Merece la pena ir. Nos trataron muy bien. Gracias a Manuel, Juanma y MCarmen por el cariño que nos dieron en la visita a las bodegas y la comida. Impresionante todo. Un abrazo

La comida no está mal sin tampoco ser una maravilla, el servicio horroroso, tuvimos que pedir repetidas veces cualquier cosa para que nos sirvieran, y eso que había bastantes camareros pero eran poco efectivos. Esto nos hizo enfadarnos, ya que no disfrutamos la comida. El sitio merece la pena lo tienen muy bien acondicionado y es agradable estar pasando un buen rato.

Hacia muchos años que había ido y no recordaba muy bien cómo era. Sitio espectacular para distraerte y ver todos los exteriores que tienen,los museos de cosa antiguas de la agricultura de antes que a uno le traen muchos recuerdos. Luego nos atendieron muy bien dándonos a degustar unos de sus vinos y la comida en el restaurante genial,todo muy bueno.Sin duda para volver a repetir otra vez.

Un buen restaurante en un entorno excepcional. Hay que ver si bodega

Muy recomendable para visitar y comer allí.

Hoy quiero reseñar la bodega Cuatro Vientos, un cortijo alpujarreño situado en La Contraviesa, termino municipal de Murtas en la provincia de Granada. Hace unos dias tuve el gusto de conocer ese lugar que me sorprendio sobremanera. Es un cortijo que ha sabido adaptarse y sacar rendimiento de donde, practicamente, poco habia. Ha montado una bodega donde se elaboran buenos caldos y a su sombra, crecen muchas obradas de viñedos en donde se cosecha gran cantidad de uva de donde se extrae el buen vino. Pero no solo se conformó con la bodega, sino que tiene un restaurante donde se pueden gustar exquisitos platos, servidos con la amavilidad y simpatia de su personal. Se puede visitar su inmenso museo etnográfico donde se pueden contemplar todo tipo de herramientas, básicamente, las relacionadas con la agricultura y sus derivados. Y como no, su inmenso museo del vino. Es un lugar donde merece la pena girar una visita.