Blanco Restaurante en Navia

Dormí muy bien, el hotel es muy bueno, me gustó. Era muy silencioso allí, sin ruido de tráfico.

Hola hemos estado 9 días en el el hotel y julio el camarero 👌la verdad k todo el mundo nos trató genial recepción en fin muy bien las cenas son d autor con poca consistencia y las habitaciones el primer día k entramos super limpias los demás días no sé esmeraban

Estuve de paso, haciendo el Camino a Santiago. Es un 4 🌟, tiene dos restaurantes, uno gourmet y otro tipo turista; ambos muy buenos. Comí en los dos restaurantes y desayuné. El servicio, tanto de recepción como de restauración, competente. La habitación, con baño, era amplia y disponía de lo necesario, quizá un poco anticuada 🛎

Hemos disfrutado de un fin de semana muy agradable en este hotel, un establecimiento familiar que transmite un alto sentido de la gestión hotelera y de la restauración. El edificio, de singular forma circular, responde a un capricho arquitectónico que lo hace único. Los materiales empleados, la calidad de las instalaciones y el gusto por los detalles revelan un proyecto cuidado con esmero. Mención especial merece el restaurante: la profesionalidad y cercanía de Julio, su maître, hicieron de nuestras dos cenas una experiencia excepcional. Fue un verdadero privilegio contar con su atención. Un aspecto digno de destacar es la impecable gestión de la privacidad: aun coincidiendo con dos bodas que reunieron a unos 280 invitados, el descanso y la tranquilidad de los huéspedes no se vieron afectados en ningún momento. En contraste, el único punto negativo fue la decepcionante experiencia en el spa. El sábado nos atendió una empleada cuya falta de motivación, escasa destreza en los tratamientos y nula orientación al cliente hicieron del servicio algo poco recomendable. Consideramos prudente evitar el spa en sábados de septiembre. Aun así, el balance general es muy positivo: un hotel que combina personalidad, calidad y hospitalidad, y que sin duda merece ser recomendado y repetido.

Muy buena estancia y la comida muy buena

Muy Buen trato y muy buena comida, lugar tranquilo y con un amplio aparcamiento

Muy buenas instalaciones, cercano al pueblo de Navia. Buen desayuno, con variedad.

Relax, comer muy bien, turismo . Una estancia para repetir.

Hotel renovado a medias recepción y bar muy nuevo, recepcionistas dejan que desear, te explican poco y cuando pasas si tú no saludas ni te miran La habitación muy anticuada con baño con bañera y sin mampara ni cortina, de tamaño está bien y la cama grande pero colchón y almohas viejos. Desayuno bueno, pero todos los días lo mismo, no varían nada. Cenamos 3 días en el bar y muy bien, platos sencillos y bien elaborados, el servicio suficiente, había algún camarero que no se enteraba mucho. Comimos un día en el restaurante de carta y la comida fue regular, el primer plato correcto, pero pedimos arroz meloso con Bogavante y el arroz estaba seco y amargaba, supongo que se les quemó el sofrito y dejo mal gusto, por suerte el Bogavante lo hicieron aparte y se pudo comer cosas que el arroz fue imposible, en pocas palabras una comida que podía haber estado bien, quedó en decepción 😞, tengo que decir que el camarero que nos atendió fue muy correcto y creo que se dió cuenta de lo que pasó y nos invitó al café Conclusión Hotel que no está mal del todo pero que tiene que mejorar bastantes cosas.

El estacionamiento era muy amplio y el vestíbulo tenía un ambiente agradable, algo que esperaba mucho, pero el aire acondicionado de la habitación no funcionó durante mi estancia de cuatro días. Dijeron que lo repararían, pero nunca lo hicieron. La segunda noche, después de las 23:00, la habitación era tan ruidosa que no pude dormir por las fuertes vibraciones. Contacté con recepción, pero me dijeron que había habido una fiesta y que estaban limpiando el restaurante en ese momento, y que debía contactar directamente con el restaurante. Fue una respuesta muy decepcionante. El desayuno estuvo delicioso, pero había tantas moscas que me costaba concentrarme.