Bar Virtudes en Frigiliana

¡Delicioso! Muy buena paella y mariscos.

El servicio era genial y la comida también. Fuimos por recomendación de los negocios locales, si eres Español y quieres buena comida a buen precio lo recomiendo.

Paella deliciosa, y toda la comida en general, y la atención del diez.

Tomamos una copa y café muy tranquilamente. Te puedes pasar horas charlando. Muy agradable.

El Restaurante Virtudes en Frigiliana es de esos lugares con los que te topas después de perderte por las callejuelas encaladas de los pueblos blancos andaluces de ensueño. Fuimos directos a por la paella de marisco, y déjenme decirles: esta belleza podría alimentar fácilmente a tres aventureros hambrientos. Rebosante de sabor y repleta de almejas, mejillones, trozos de pulpo, gambas y tierno pescado. Cada cucharada era como una carta de amor del Mediterráneo. Acompañado de su vino blanco Verdejo de la casa, se convirtió en un auténtico romance vacacional. Como estar frente al mar implica comprometerse con la vida marinera, también pedimos el salmón al horno: cocinado a la perfección, desmenuzado y perfecto para compartir. Comimos al aire libre, bendecidos por un sol radiante y una brisa fresca, de esas que hacen que tus fotos de vacaciones parezcan una vida eternamente fabulosa, con vistas a las paredes encaladas entre las montañas y el mar. Sí, puede que tengan que esperar un poco para sentarse, pero considérelo la forma en que el universo los prepara para el festín que se avecina.

El restaurante ofrece auténtica cocina española con una buena selección de platos tradicionales. Un atractivo especial es la posibilidad de disfrutar de una copa en la terraza al atardecer: un verdadero placer para quienes aprecian un ambiente agradable. Las anchoas fritas estaban crujientes y bien sazonadas. La paella de pescado estaba bien, pero no era la mejor que he probado; sabrosa, pero con un poco más de intensidad habría sido perfecta. El servicio fue amable y rápido, lo que hizo que la visita fuera muy agradable. En definitiva, un restaurante muy recomendable para cualquiera que quiera disfrutar de especialidades españolas en un ambiente relajado.

Nos han servido una ensalada de frutos secos con queso de cabra y vinagreta de miel de caña y un plato de revueltos con espárragos jamón y langostinos estaban súper ricos ir de postre gachas de la abuela con miel de caña muy bueno y 2 coca-colas el servicio de los camareros buenísimo lo aconsejo que vaya la gente y un entorno natural muy bonito ha sido muy barato

Se come super bien. Pedimos paella para compartir y estaba tremenda. El servicio muy atento

Ubicación céntrica. Precios muy justos. Mi hamburguesa estaba muy rica. Las patatas fritas eran un poco escasas. La ensalada no tenía aliño.

Un lugar con buenas vistas, comida rica y buena atencion