Bar Sapiens en Tomares

Sitio agradable , personal simpático destacando a Jose que nos atendió estupendo

La misma cocina que la Bodeguita, lo mejor, después de comer una sobremesa con alguna que otra copa 🍷

La camarera que nos atendió fue muy amable y la merienda estaba buena, el precio algo elevado pero dentro de lo normal. Lo único malo fue que estaban faltos de personal y no podían dar todo el servicio disponible y los tiempos de atención eran elevados, pero es culpa del local no de los empleados.

Meriendas variadas y muy bien presentadas. Buenas atención. Copas y sobre todo, muy buen ambiente

Pasamos a tomar una copa y fueron atentos y serviciales.

Buen ambiente, ricos dulces, servicio atento y agradable.

De lo mejor que hay en Tomares para tomar un desayuno o para copas por la tarde/noche

Es la primera vez que iba y la verdad es que súper bien. Fuimos a merendar con nuestro perrete y sin decirle nada el camarero que nos atendió le puso agüita, cosa que se agradece mucho. También nos recomendó muy bien y tiene mucho espacio de terraza. Pedimos dos tartas y las dos muy buenas. Sin duda repetiremos.

Indiscutible: donde mejor se desayuna del Aljarafe. Ambiente fantástico, variada oferta. Siempre se acierta. Un estupendo servicio. Merece la pena también en otros horarios, para tomar una copa o probar sus tartas.

Acudo con cierta frecuencia, sobre todo a desayunar, a este local. Me resulta muy agradable y sirve productos de calidad. Te atienden con mucha amabilidad y eso lo agradecemos quienes acudimos allí. Hay posibilidad de permanecer dentro del local o fuera. En la parte de fuera dispone de dos espacios diferenciados : una terraza cubierta y otra descubierta. Me gustaría valorarlo con la máxima puntuación, pero hay un aspecto que hace que eso no sea así: en la terraza, en su parte cubierta, se fuma a pesar de haber un cartel que lo prohíbe. O sobra el cartel o no se puede fumar. Hay algún cliente asiduo que, estando yo presente, incluso ha pedido un cenicero, y amablemente se lo ha facilitado alguna de las camareras, dirigiéndose a él por su nombre y mostrando cierta familiaridad. También se produce esta situación sobre todo con alumnado del instituto cercano, si bien éstos no suelen utilizar ceniceros sino que directamente arrojan sus colillas a la moqueta del suelo. Sería conveniente que imperaran el civismo y el respeto de las normas por parte de todos.