Últimamente, tengo la sensación de que todos los garitos que se van abriendo en Bilbao son con grandes pretensiones, bajos precios y mismos productos… básicamente, que no me dicen nada especial. Vas una vez y no ves nada que te atrape. Justo lo contrario es lo que me pasa cuando entro en el Hiru A. Según entras por la puerta te recibe Arantza con un cariñoso saludo y ya te transporta a otro lugar, yo diría de antaño, de los de siempre. Es un bar con Alma. Arantza tira las cañas como si estuvieras en la mejor tasca de Madrid y Ana (otra de las “A” del Hiru A) prepara unos pintxos riquísimos. Pero lo que me encanta es cuando voy a comer. Los platos llevan nombre, no van a la mesa 3 o mesa 6, van a la mesa de Juana, de Borja, de Patxi,… siempre con cariño y amabilidad. Y por fin, a lo que iba😃,… como los menús me parecen demasiada comida, me encanta que tenga el plato del día, mejor dicho platos, todos ellos deliciosos. Lo primero, las riquísimas vainas Hiru A, si no eres muy de verduras con este plato seguro que te empiezan a gustar, siguiendo con una ensaladilla rusa tan clásica como espectacular, un día te encuentras con unas alubias rojas, otro con un arroz, otro con una pasta súper sabrosa, siempre hay plato de carne… ah! cómo no hablar de sus croquetas y anchoas rebozadas. Si vas a comerlas, date prisa que desaparecen rápido!. Ahí se nota la mano de la tercera “A”, la Amatxu de Arantza y Ana y su estilo de cocina de toda la vida.
Y para terminar un postre o un café con bizcocho. También riquísimos.
Borja Gómez
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29 Marzo 2025
10,0