Bar Guillermina en Cabrales

Hay qué hacer reserva de mesa? No encuentro teléfono para hacer reserva para comer mañana 10 febrero 24

Sitio idílico por su tranquilidad y sus vistas, comida casera de calidad, el Dueño del establecimiento muy amable y dispuesto a ayudar para que tú visita sea de 10. Precios acorde a todas las dificultades de un lugar remoto en el que solo se puede acceder en funicular o pegándote una buena caminata. Volvería sin ninguna duda.

Muy buena la fabada y el chorizo frito, lástima que era final de temporada y no tenía mas variedad.

Un lugar entrañable para disfrutar, sin móvil, charlando......

Subimos a Bulnes y el primer lugar que encontramos fue este. Sin temor a decirlo fue la mejor comida que hice en España este año y recorrí durante mes y medio todo Asturias, Galicia, Madrid, Segovia y buena parte de Cantabria. El jamón y el queso, fantásticos. La sidra espectacular. La fabada increíble y con el cabrito me dieron ganas de meterme a la cocina y darle un gran abrazo a quien lo hubiera cocinado. En cuanto a la atención, esta fue de diez, inmejorable, el Sr. Corro, gran persona y una excelente platica, café y aguardiente para cerrar con broche de oro. el costo... no lo recuerdo, lo que hubiera sido, valió la pena.

Buen sitio donde comer, calidad - precio excelente, por no hablar del súper plato combinado que nos sacaron, que del que come uno comen tres!!! El trato por parte del señor que nos atendió allí fue de lo más cercano, muy amable y simpático. Recomendamos!

Experiencia completa de un restaurante asturiano. No entiendo otras reseñas tan bajas. Cuando vas a un pueblo, tienes que quitarte la mentalidad urbanita. Es un pueblo sin conexión con carretera. Ya suficiente que tienen abierto. Mis máximos respetos, con lo difícil que es tener un negocio en plena montaña.

Bar muy sencillo pero la comida es casera y está muy buena. Comimos el cabrito guisado con patatas fritas, una ración generosa, 20€. Huevos fritos caseros con lomo y patatas fritas, 12€

Un local muy auténtico y la comida casera y riquísima. Llegamos un poco tarde para comer y nos atendieron sin problema. Comimos chorizo a la sidra, fabada y natillas. Todo buenísimo.

El único sitio abierto cuando visitamos Bulnes (primera semana de noviembre). Tomamos solo unas bebidas calientes, ya que era temprano para comer (cocina abre a las 13h). Vistas impresionantes desde su pequeña terraza