Bar El Uncal en Parres

Un buen restaurante donde ir a comer. Precio menú 27 euros por persona, abundante y mucha calidad. Recomendado.

Espectacular el trato y la comida. Comida casera, para disfrutarla con calma y deleitarse. El trato muy familiar. Un restaurante de comida casera exquisita en un entorno remoto y apacible. Mis compañeros de mesa alucinaron tanto como yo. Visita obligada, aunque haya que desviarse un poco.

Si quieres disfrutar de auténtica y deliciosa comida asturiana, este es su sitio

Comida de lo mejor que e probado buena calidad abundante y una excelente cocina repetiré.

Comimos tres personas y nos ha encantado, la fabada, el arroz con chipirones, las albóndigas y el arroz con leche todo de 10, repetiremos.

Cuando piensas en ir a Asturias y cómo se come, o cómo se comía hace años, estás imaginando sin saberlo El Uncal. El menú tiene platos típicos elaborados con experiencia y en cantidad suficiente para ser aconsejable reposar un rato tras la comida. Verdinas con marisco, albóndigas, codillo, arroz con leche, no puedo decir que estaba mejor pero la sopera y los platos quedaron limpios. Tal vez para algunos sea un "pero" la carretera, pero si las carreteras de montaña estrechas y con curvas no te incomodan, el paisaje te recompensa.

Impresionante. Comida casera de la buena y cantidad. Me pedí fabada y pitu caleya y todo de 10....El precio de risa. Muy recomendable.

Me llevaron a este lugar porque me dijeron que hacen un arroz con pitu de caleya espectacular. Lo encargaron con días de antelación. Y, efectivamente, estaba delicioso. Raciones generosas. Éramos tres y sobró arroz que nos prepaparon, muy amablemente, para llevar. Los postres deliciosos. Ambiente tranquilo a pesar de estar el comedor lleno. He vuelto a repetir. Han subido un poquito los precios pero es que la calidad y la cantidad es inigualable. Seguro que hay una tercera vez 😀

Eramos seis. Reservado con antelacion. Mesa en el bar. bien, amplia. El sitio se encuentra en un pueblo muy pequeño, tiene muy buenas vistas, aparcamiento privado. El interior esta lleno de cacharros de porcelana y resulta todo muy rustico y agradable. Nos atendieron rapido. No hay carta. Es a base de menu con varios primeros y segundos a elegir, postre y vino y agua. PRIMEROS: Dos pedimos fabada. Abundante. Para repetir mas de una vez. Estaba muy rica. Fabes suaves y caldo ligado y sabroso. El compango aceptable. El tocino un poco durillo. Para mi lo mejor de lo que se pidio. - Dos pidieron fidegua. Tambien muy abundante. Sobro. Me gusta con el fideo mas fino. Tenia almejas y gambas, creo. La probe. Bien sin mas. - Una pidio calamares en su tienta con arroz. Los calamares estaban ricos. - Tambien pidieron menestra. Estaba un poco sosa. Lo que menos gusto. SEGUNDOS. Cuatro pedimos Pitu Caleya. No es el mejor que he comido, pero estaba aceptable. Algunas partes un poco secas. Dos pidieron bacalao. No lo probe. no puedo opinar. Postre: Habia tres para elegir. Pedi arroz con leche. Me gusto bastante, aunque no estaba excesivamente dulce. Bebidas: Agua, vino y casera. Aparte pedimos un tinto rioja Ramon Bilbao y un blanco de la zona ( no tenia ni idea que al lado del rte. habia una bodega ). El servicio, atencion y tempo platos correcto. Salimos, incluidos cafes, a 32,50e.

Grata sorpresa al encontrar un local de estas características con una comida tradicional que me recordó los guisos realizados en casa. Raciones abundantes con un servicio diligente, no hay pomposidad,el lugar no lo necesita. Les verdines amariscades y les patatas rellenes dignas de mención. Tal es mi grado de satisfacción que en breve volveré para catar el resto de las sugerencias. El precio es muy razonable y el ambiente muy distendido. Volveré.