Bar El Niño en Cardeña

Reservamos mesa para 3 por WhatsApp,no habíamos ido nunca,nuestra hija iba a un curso de inmersión lingüística al lado .le dijimos que nos pusieran donde ellos creyeran que estaríamos mejor y así fue , dentro en un patio muy coqueto y a la vez típico andaluz , La comida espectacular no habíamos probado nunca el ciervo en salsa ,una maravilla para no dejar de comerlo tierno jugoso y la salsa lo único que pedía era pan y más pan para mojar . El tomate solo con aceite y sal ummmm delicius. También comimos patatas huevo y chorizo, se notaba el sabor de un chorizo casero y de pueblo. La familia que lleva el negoció.son de admirar tanto el dueño,como el hijo y la chica que nos atendió.que no sé si es familia.pero super super pendiente de todo. No quiero dejarme atrás a la cocinera que casi no hablamos de ella, pero que nada saldría de esa cocina sino fuese por ella y vaya platos que saca y que aunque estando sola y no sin esfuerzo saca el negocio junto con los demás adelanté. Un 10 para el negocio.

Aquí la tienes: El Bar El Niño, en Venta del Charco, es un auténtico viaje en el tiempo. Conserva su estética intacta desde que abrió, dándole un alma y una identidad únicas. Un rincón con muchísima solera, de los que ya no quedan. El sitio perfecto para perderse y olvidarse del reloj.

La comida estaba buenísima y el trato excelente, muy buen servicio.

La comida muy buena. El servicio genial. Lo recomendaremos a nuestros conocido.

Maravilla de lugar. Comida casera y gente agradable . Un lugar para disfrutar. Lo recomiendo sobre todo el lechón frito espectacular!!!

La comida rica, el personal cercano y el patio de dentro familiar. Volveremos sin duda. Gracias

Estupendo lugar. Increíble cocina. Charo siempre pendiente. Ciervo en salsa. Riquísimo. Así como el lechón. Y la tarta de queso... para qué hablar. Maravilloso todo. Obligado visitarlo. No lo dudéis!

Restaurante familiar a descubrir! Un 10, para la cocina. Pedimos a la camarera si nos podian aconsejar desde cocina los platos del día, y seguido Charo, encargada de cocina, nos atendio de maravilla y aconsejó sobre las variedades que había preparado. El resumen podría ser un deleite para cualquier comensal... el ciervo, el lechón, el gazpacho, y los postres: maravillosos Ojalá podamos volver pronto. Enhorabuena a Charo.

Un sitio encantador, comida casera y excelente servicio, volveremos sin duda!

Es la segunda vez que voy allí con mi familia y la comida está excepcionalmente buena. Los postres caseros son deliciosos (recomiendo la tarta de torrijas). Como broche, la atención del personal es inmejorable. Sin duda, no será la última vez.