23/06/2025: Es un comedor mediano.
Nos recibieron con amabilidad.
Comenzamos con unos nachos con Idiazabal trufado, regados con marianitos preparados.
Como principales, dados de atún rojo de almadraba, trufados con huevo frito, estaban deliciosos.
Rodaballo a la brasa con salsa de txakoli y setas, exquisito.
Presa ibérica, muy rica.
De postre, peras braseadas con sopa de canela y vermut, excelente.
23/06/2025: MUY BUENA OPCIÓN PARA UNA BUENA COMIDA EN BILBAO.
Acudimos a este establecimiento por recomendación de alguna amiga de una amiga de alguna amiga, y así sucesivamente… vamoh que no lo encontramos por GoogleMaps si no que fuimos a tiro hecho.
Teníamos la reserva tarde (15:30h), pero con toda la amabilidad del mundo pudimos tomarnos un primer vermut en las mesas altas de la terraza, para hacer estomago para lo que se nos venía. Vermut rojo recomendado por la camarera, muy rico, uno de ellos sin aceitunas claramente por petición de mi acompañante, la eterna lucha entre pataita al olivo o poder acercarme a ella tras comer olivas. El vermut venía sin hielo, nos sorprendió pero entendimos que era la forma correcta de servirlos. Si, somos de esos que beben vermut con hielo e incluso con limonada algunas veces, llámenme cateto ( a mucha honra)
Una vez pasamos dentro, el trato fue agradable y ejemplar. Recomendado pedir dados de atún rojo, aunque tengo que reconocer que pensé que eran fritos pero era una especie de tartar de atún de categoría. Las gyozas de verdura muy recomendadas, aunque digan que pican no pican, y si te apetecen unas croquetas de pollo en forma de gyoza, puedes pedir también las gyozas de pollo (demasiado rellenas de pollo para nuestro gusto y algo secas). Para terminar, pedimos txipiron, que nos dejó boquiabiertos por la cantidad (un txipiron cada uno) y por su salsa de tinta negra con algún toque de guiso de cerdo que se apreciaba pero en sabor pero no se dejaba ver.
Por último y no menos importante, he de mencionar el placer personal que me supuso ver la cara de mi querida acompañante al servirnos el póster SUFLÉ DE CHOCOLATE. Créanme que ver esa cara de felicidad ante un postre de la persona a la que quieres supera todo tipo de expectativas. A pesar de no ser fan del chocolate, solo por este motivo repetiría una y mil veces este postre. Además que también estaba bueno, todo hay que decirlo.
En resumen, muy recomendado, algo caro pero pagas el producto y lo que tomas, local agradable. Si quieres salir de tanto pintxo y estás harto de tanto pan en Bilbao, este es tu sitio.
Único problema, alguien sabe la receta o como hacer de forma casera el SUFLÉ DE CHOCOLATE? Quiero volver a ver esa cara de felicidad de mi acompañante, prometo no prenderle fuego a la cocina.