Balbisiana en Madrid

Ricos postres en un ambiente agradable.

Hemos desayunado y estaba todo muy rico. El ambiente acogedor y con música relajante. El personal muy amable

Espectacular! Desde el local que es divino, la comida que está deliciosa, la música súper agradable y el servicio de Dayana que ha sido impecable, amable y agradable. Para repetir sin duda cada vez que vayamos a Madrid.

Muy rico, buen ambiente y servicio. Nos atendió Daiana, muy maja.

Un desayuno de lujo Gracias Diana

Hemos venido con un bebé de un año y medio a tomar un brunch y nos ha encantado la experiencia. Las personas que nos han atendido, entre otras, Ana y Steven, han sido encantadoras. No es la primera vez que venimos y no será la última.

Tanto las bebidas como las dos tartas que probamos estaban riquísimas, pero el servicio muy lento. Nos tuvieron esperando un buen rato habiendo sitios libres, y luego tardaron también en servirnos. Una pena pues el sitio es estupendo, espero que mejoren en este aspecto.

Llevábamos mucho tiempo queriendo probarlo y los dulces son excepcionales, especialmente la tarta de lima, exquisita. También los smothies, granizados y tés fríos. Todo muy rico. Sin embargo, el servicio no es acorde. Estuvimos mucho tiempo esperando para sentarnos a pesar de tener varias mesas libres y fue muy lento y poco amable. Un lugar como Balbisiana debería tener un servicio más acorde, pero repetiremos para probar cosas nuevas y ver si tenemos más suerte con el servicio.

Salgo a las 17:30 de una densa reunión de trabajo en una oficina cercana, hacía un calor horroroso, paso por la puerta de este establecimiento al que hacía tiempo quería venir y entré. Pedí un refresco (botella como tiene que ser) y un trozo de tarta de queso excelente, además la atención del personal y el precio son correctos. Entonces porqué no lo valoro mejor, pues porque nada más sentarme me noto incómodo y entonces me doy cuenta que la temperatura en el interior es la misma que en el exterior, más de treinta grados, no tienen aire acondicionado o no lo conectan por lo menos en las mesas junto a la entrada, desconozco si lo tienen en el salón interior. En fin, lo que pretendía que fuera una merienda tranquila resultó que me lo tomé todo muy rápido y a los tres minutos estaba fuera y arrepentido de haber entrado

Llevaba mucho tiempo admirando la tarta charlotte cada vez que pasaba por la cristalera del local de la calle Velázquez. Me llamaba siempre la atención entre todas las que tenían en el mostrador. Hace poco me animé a comprar una y no me pareció una gran cosa.