Bailén 17 en Alicante

Estuvimos cenando en este restaurante con toques murcianos y la experiencia ha sido muy positiva. Probamos todos los entrantes y, aunque el que menos nos convenció fue la piruleta de morcilla con manzana, el bacalao crujiente y el canelón de pato con foie nos encantaron, realmente bien elaborados. Como broche final tomamos un paparajote con helado, toda una sorpresa para mi mujer, que es de origen murciano, y le hizo mucha ilusión. Nos hubiera gustado encontrar algo más de verdura en la propuesta, ya que nos gusta mucho, pero en general disfrutamos bastante. Para beber pedimos un vino blanco de Jumilla (Chardonnay, la uva favorita de mi mujer), aunque no lo tenían disponible y lo sustituyeron por un vino francés que acompañó bien la cena. El ambiente es agradable y la atención fue buena. Sin duda un lugar recomendable para disfrutar de sabores murcianos con un toque especial. Volveremos a probar el restó de la carta.

La comida está muy rica, recomiendo el bacalao, las marineras y los calamares a la andaluza

Un sitio nuevo para seguir descubriendo

Hemos cenado como Reyes. Las croquetas buenísimas, las bravas riquísimas y una marinera cargada de ensaladilla que estaba deliciosa. De principal un entrecot trinchado y con patata a lo pobre y un tataki de atún brutaly la carne espectacular. La atención de Noelia ha sido de 10. Sin duda un gran descubrimiento y volveremos seguro.

En Bailén 17 la experiencia gastronómica se convierte en un auténtico placer para los sentidos. Desde el primer bocado, cada plato sorprende por su cuidado en la presentación y, sobre todo, por la calidad de los sabores. Las patatas bravas merecen una mención especial: originales, distintas y con un toque muy peculiar que las hace inolvidables. Los gyozas al vapor estaban simplemente deliciosos, llenos de frescura y sabor a mar. El tartar de salmón, delicado y sabroso, y el calamar a la plancha, en su punto justo, elevaron aún más la experiencia. Otro acierto fueron las alcachofas con jamón crujiente, un contraste perfecto entre la suavidad de la verdura y la intensidad del jamón. La tapa de pulpo y la mini hamburguesa de Angus no se quedaron atrás, demostrando la versatilidad y creatividad de la cocina de este lugar. El broche de oro llegó con los postres, abundantes y sorprendentes. Entre ellos, el paparajote murciano fue el protagonista indiscutible: un dulce fuera de lo común, que enamora por su originalidad y sabor. En definitiva, Bailén 17 es mucho más que un restaurante: es un rincón donde tradición e innovación se encuentran para regalar momentos memorables. Sin duda, un lugar imprescindible para quienes buscan disfrutar de la buena mesa.

Tapas gourmet muy buenas, presentadas con un toque de trampantojo. El chef es realmente talentoso y el servicio fue rápido. Aunque el lugar es acogedor y chic, hay mucho espacio y nos sentimos cómodos viniendo con nuestros hijos.

Simplemente perfecto. Comida riquísima una delicadeza un gusto por los platos espectacular. El ambiente perfecto el dueño/ camarero que nos atendió genial.. educado... Nos recomendó platos a cual mejor .. la comida salió rápido. Perfecto todo. Una pena no tener uno en Madrid !! Volveremos y lo recomendaremos a todo el mundo.

Excelente, acabo de salir del restaurante súper satisfecho con todos los platos que hemos pedido. La carta tiene una gran variedad, y tiene platos fuera de carta que para mí eran de lo mejor. El pulpo y el chupa-chups de morcilla y manzana han sido de mis platos preferidos en el restaurante. El paparajote de postre no lo conocía, muy recomendable.

Nos atendieron y cenamos super bien ! Un ambiente tranquilo, agradable y la comida deliciosa 😋 volveremos

Lugar encantador con excelente comida y muy íntimo como local, con una excelente ubicación.