Bad Company 1920 en Madrid

¡Guau! Fue divertidísimo ir a este sitio. Fuimos por capricho y tuvimos que buscar la contraseña para entrar. Una vez dentro, es una experiencia de bar clandestino genial. El concepto que tienen ahora es genial y qué divertido que cambie según la temporada. ¡Tengo muchas ganas de volver y probar este sitio! El personal también fue excelente: súper amables y conversaron muy bien. Siento que añadir fotos le resta valor a la experiencia, así que, mejor, ¡llame la puerta y compruébelo usted mismo!

No tenía ni idea de lo que hacía, y aún estaría en la calle, frente a la puerta, si no hubiera sido por los majos de Washington D. C. que conocían el truco de Instagram. Un ambiente espectacular. Bebidas originales. ¡Y una cereza flameada para rematar! ¡Esta gente se toma la coctelería MUY en serio! ¡Qué ganas de volver a Madrid para compartir esto con mis amigos!

Por alguna razón, son de los mejores. Un concepto totalmente funcional, imprescindible.

Recomiendo este lugar sin reservas. Ha sido un lugar de referencia para descubrir los bares de cócteles. Servicio impecable y una amplia variedad de cócteles que siempre cambian.

Divertido, bonito, buenos cócteles. El ambiente quizás demasiado tranquilo

Visitamos Bad Company como turistas en Madrid y nos encantó la experiencia. Si buscas cócteles creativos, un ambiente genial y un toque de misterio, este es el lugar. El personal fue súper amable y servicial, guiándonos por su singular carta. No esperes los cócteles típicos... si buscas un espresso martini en una copa clásica, este no es tu sitio. Pero si te gusta la historia, el ambiente y las bebidas divertidas e innovadoras: ¡lo recomendamos encarecidamente para algo fuera de lo común!

Una experiencia muy top !!! Mira que lo pregunte, pero no recuerdo. No recuerdo los nombres chicos... Lo siento. Estuvimos el sabado 20/09 ellos se acordaran. 5 amig@s 3 chicas y 2 chicos. Llegamos los primeros. Nos encanto la puesta en escena, la carta de cocktails, la maestria del barman. Todo muy bien. Volveremos y lo recomiendo.

El primer bar clandestino al que fui y estuvo a la altura de las expectativas. Me sentí como si hubiera viajado a 1920.

Un elemento básico en mi rutina.

El mejor speakeasy bar en el que he estado! Siempre están al nivel, desde que te reciben en la entrada hasta el final. Sus cócteles son los mejores, volveremos siempre!