Atípic Espai Gastronòmic en Calella

Comida sin envidiar la alta cocina. Comida de calidad sin ser caro. Lugar perfecto con buenos vinos. El camarero nos hizo una expliación muy interesante del vino y la camarera super amable. Un sitio que recomiendo si quieres llevar a tu paladar a un mundo trambólico e impresionante. Muy agradecido por el trato y por el trabajo que realizan todo aquel equipo.

El mejor restaurante de calella en nuestra opinión, el trato recibido increíble, productos de calidad y buenísimos. Sin duda volveremos, un gran descubrimiento! Además del menú de 25€ fin de semana tan bien de precio con comida buenísima! 100% recomendable

Una experiencia gastronómica muy interesante y a un precio mas que razonable. Que el aspecto de restaurante de toda la vida no te engañe. Te atenderán dos amabilísimas camareras que te van a tratar tan bien que te sentirás en familia. Pero la experiencia sigue cuando van saliendo de la cocina platillos creativos, bien integrados y sabrosos. FInalmente el precio es ajustado. Muy recomendable

Una experiencia gastronómica muy interesante y a un precio mas que razonable. Que el aspecto de restaurante de toda la vida no te engañe. Te atenderán dos amabilísimas camareras que te van a tratar tan bien que te sentirás en familia. Pero la experiencia sigue cuando van saliendo de la cocina platillos creativos, bien integrados y sabrosos. FInalmente el precio es ajustado. Muy recomendable

Un servicio impecable y todos los platos exquisitos que te dejaban boquiabiertos.

Me arrepiento de no haberle hecho foto a los platos, pero es que me he concentrado por completo en paladearlos. Probé una "crema de puerro, jamón y su crujiente" como primer plato. Una crema que, aún siendo ligera, tenía cuerpo y mucho sabor, la he disfrutado muchísimo, me ha recordado a la cocina casera con un toque propio y moderno. El segundo plato fue "arroz de ternera con crema de pimientos de piquillo"... el arroz estaba en su punto perfecto. Acostumbro a comer la carne más hecha, pero de la manera en la que la cocinaron, me pareció jugosa y sabrosa. La crema de pimiento de piquillo que lo acompaña todo, deliciosa. De postre probé las "texturas de chocolate"... Y la verdad es que hace honor al nombre. Un postre dulce, sin llegar a ser empalagoso, con diversos tipos de chocolate, me encantó el que llevaba crocanti. ¡Recomiendo probarlo! Sin duda repetiré... he visto que tienen una buena variedad de platos, el trato ha sido muy agradable y en cuanto a tiempos, ha estado todo correcto. ¡¡Muchas gracias!! 🌸

La comida es exquisita, había estado cenando a la carta y muy bien, hoy hemos hecho menú fin de semana y nos ha gustado mucho, el 2º plato algo justo de cantidad pero buenísimo todo, la chica que nos ha servido un 10 también, sin dudarlo repetiremos

Era un miércoles y buscábamos un lugar agradable para cenar. Llamamos a varios restaurantes que, de hecho, no abrían esa noche. Finalmente, nuestra reserva fue anulada (problemas con la llegada de agua en otro restaurante), y decidimos, siguiendo el consejo de nuestro peluquero, probar Atipic... ¡No nos decepcionó nada y seguro que volveremos a probar el resto de platos de la carta! El personal de sala es amable, las mesas están bien espaciadas para respetar la intimidad, y en lo que se refiere a la cocina... Una maravilla: sabores complejos sin artificios. Las raciones pueden parecer pequeñas, pero después de 4 platos (unos 60€ con dos botellas de agua sin gas), estábamos hartos (¡y somos de buena comida!). Lo recomendamos sin lugar a dudas!

Hemos ido un grupo de amigos a una cena con Tarot incluido, ha sido muy agradable, la comida con explosión de sabores, el servicio correcto, la camarera muy agradable.

Fuimos a comer al Atipic, de Calella de Mar, yo ya iba sobre seguro porque el día anterior estuvieron mi mujer y mi suegra y les encantó. Es un lugar que transmite muy buen rollo, y la profesionalidad y amabilidad de Pere se nota en cada uno de los detalles. Ofrecen una cocina muy bien elaborada y una presentación muy cuidada. Todo lo que pedimos en su punto y sabroso. Sin duda, todo un descubrimiento que a buen seguro volveré.