Artean Barra Abierta en San Sebastián

Una auténtica joya escondida, mi lugar favorito en San Sebastián, ¡y probablemente en cualquier sitio!

Este es un gran restaurante. La comida, el vino y el servicio son estelares. Muy a tono con el tiempo y el espacio, y está dirigido de forma impresionante por solo tres personas.

Artean en Donostia no persigue modas, sino que crea las suyas propias. Se trata de comida con alma, arraigada en la tradición vasca, pero sin miedo a arriesgarse para que te sientes más erguido en la mesa. Cada plato es como una historia contada con fuego, humo y brisa marina: sabores audaces, profundamente personales, pero a la vez espontáneos. ¿Y el servicio? Impecable. Cada miembro del personal se comporta como un auténtico dueño, no solo sirviendo platos, sino guiándote a través de una experiencia en la que creen firmemente. En una ciudad que no tolera la mediocridad, Artean no solo se impone, sino que brilla.

De los cuatro días que estuvimos en San Sebastián, Artean tenía la mejor comida y también cócteles buenísimos. Una experiencia única, un restaurante imprescindible en la ciudad.

He ido dos veces a este restaurante y la verdad es que el personal es cercano, el ambiente genial y la comida deliciosa! Os lo recomiendo!

¡Tuvimos un almuerzo encantador y disfrutamos cada momento!

¡Absolutamente fantástico! No tengo nada negativo que decir. Ven aquí si buscas una auténtica experiencia gourmet.

Fuimos a cenar y la experiencia fue excelente de principio a fin. El servicio fue muy profesional, con un trato amable y atento. La recomendación de vino fue fantástica y todo, desde la cubertería hasta la tranquilidad del local, me cautivó. En cuanto a la comida, todo lo que pedimos fue una delicia: el carabinero, el bao, el steak tartar y los pappardelle con bogavante son platos que recomiendo sin dudar. El postre también estuvo muy bien, con un emplatado espectacular que cerró la velada de forma perfecta. Salimos a unos 65-70 € por persona, pero cada euro mereció la pena. Sin duda, un lugar al que volveré.

Es una pequeña joya entre los muchos establecimientos de San Sebastián. Su sala/configuración a la omakase, con capacidad para 12 comensales, lo hace muy íntimo y a la vez invita a conversar. Excelentes bebidas, carta de vinos y selección de comida, todo ello combinado con un servicio atento y una atención total a la calidad (ingredientes, presentación, selección de platos) lo convierte en una experiencia memorable. ¡Artean no te decepcionará!

Fue una experiencia increíble. Gracias al equipo de Artean.