Arre en Castelló de la Plana

Un placer para los sentidos. Gracias a todo el equipo por ofrecernos tan grata experiencia. Amenazamos con volver!

Excelente servicio, local muy bonito ya conocido por la gente de Castellón (antiguo horno de pan de tota la vida) y menú de cena EXCELENTE 👌

El sitio es un lugar muy emblemático de Castellón. La comida es de proximidad. Los platos son exquisitos y la torrà espectacular. El servicio y el trato de 12. Volveremos☺️

Restaurante excelente por decoración, ambiente, servicio y cocina

Un lugar muy agradable,la comida espectacular y el servicio muy amable, volvemos

Muy buena experiencia. Totalmente recomendable. Lugar especial, comida buena y con cantidad. Comimos el menú sin brasa, y nos encantaron los productos de proximidad servidos de forma muy elegante y original. Servicio muy amable.

Un espacio singular para comer. Agradable servicio. Entrantes bien elaborados. Carnes, en la brasa central de la mesa, a buen nivel. Tinto de Ribera del Duero a un precio razonable. En conclusión, muy satisfecho por la elección.

Lo conocimos por la ruta de las tapas... La tapas muy originales y muy buenas, repetidos

Somos fieles seguidores del Chef Gabi, y como siempre… nos ha encantado!! Sus compañeros son amables y muy profesionales. Deseamos volver pronto con la familia. ¡Enhorabuena!

Frente al idílico campo, la filosofia siempre ha tratado mal a la ciudad, como fuente de ruindad y de todos los vicios (Epícteto, San Agustín, Rousseau, Heidegger o el moderno ecologismo), idea combatida por el alemán Hans Blumenberg que comparó la urbe con un útero materno que nos protege de una naturaleza hostil y amenazadora. Recordemos que la filosofía no nació entre balidos, mugidos, zumbidos, rebuznos, cacareos y arados, sino en una ciudad de mercaderes como Mileto. Todo este tostón viene porque me apetece hablar de filosofía en estos tiempos convulsos. Para ello me retiro al Arre, en la tranquila calle de Antonio Maura, donde tomo sus dos tapas: un sotobosque compuesto por carpaccio y cremoso de champiñones en su jugo y esferas crujientes de trigo que deben romperse y mezclarse antes de consumir, pero lo que me gusta es la tapa Burriana París Londres, consistentes en dos galletas estilo franchute de grosella y rosas, cremoso de coent de Burriana y gel de té Smoky Earl Grey, realmente deliciosas. Y entonces recuerdo porqué Burriana es más importante que París y Londres: porque está más cerca de la ciudad de Castellón.