Antúnez en Barcelona

Tapas mediocres (no están mal, nada del otro mundo) a precios de alta cocina. Ambiente horrible. Ven aquí si quieres gastarte más de diez euros en una ensalada rusa con música de discoteca de 2012 a todo volumen y, posiblemente, sentado justo al lado de la puerta del baño (como si tuvieras que moverte para dejar pasar a la gente).

Comida tradicional pero bien cuidado y presentada!

Muy bueno pero siempre hace frío.

Cada año, mi grupo de amigos y yo reservamos una mesa en Antúnez para nuestro reencuentro navideño, y siempre es una experiencia memorable. Ubicado en el encantador barrio de Gràcia en Barcelona, este restaurante ofrece un ambiente acogedor y moderno, perfecto para celebraciones especiales. Entrantes destacados: La Gilda de Vallecas: Una brocheta clásica que combina aceitunas, anchoas y guindillas, ofreciendo un bocado lleno de sabor y tradición. Croquetas variadas: Imprescindibles en cada visita, con opciones como jamón ibérico, gorgonzola con pera y rabo de toro. Cada una presenta un rebozado crujiente y un relleno cremoso que deleita el paladar. Ensaladilla rusa con ventresca: Una versión refinada de este clásico, donde la suavidad de la ventresca se mezcla armoniosamente con la cremosidad de la ensaladilla. Saquito de berenjena asada: Relleno de queso de cabra, melocotón asado y aderezado con aceite de cebollino y piñones tostados, este plato ofrece una combinación equilibrada de sabores dulces y salados. Platos principales recomendados: Pulpo salteado: Servido sobre una base de parmentier y acompañado de sobrasada mallorquina, el pulpo destaca por su textura tierna y su sabor intenso. Arroz con gamba roja: Un plato que captura la esencia del mar, con un arroz en su punto perfecto y gambas rojas frescas que aportan un sabor profundo y auténtico. Canelón de pato con salsa mi-cuit: Una delicia que combina la suavidad de la pasta con un relleno jugoso de pato y una salsa rica que realza cada bocado. Tortilla de patatas poco hecha: Un imprescindible para los amantes de la tortilla jugosa, con un equilibrio perfecto entre el huevo y la patata. Alcachofas confitadas: Servidas con virutas de jamón ibérico, son un bocado crujiente por fuera y tierno por dentro, con un sabor excepcional. Steak tartar: Un plato ideal para los amantes de la carne, con un aliño equilibrado y acompañado de tostas crujientes. Bravas Antúnez: No podían faltar, con una salsa casera que mezcla tradición y un toque moderno, logrando el punto justo de picante. Postres para culminar la velada: Crema catalana con carquiñolis: Una versión tradicional con un toque especial, donde la cremosidad de la crema se complementa con la textura crujiente de los carquiñolis. Cheesecake de Nutella: Un postre indulgente que satisface a los amantes del chocolate y el queso, con una textura suave y un sabor equilibrado. El servicio en Antúnez es siempre atento y profesional, asegurando que cada detalle contribuya a una experiencia gastronómica excepcional. La relación calidad-precio es adecuada, considerando la alta calidad de los ingredientes y la creatividad en la presentación de los platos. Si buscas un lugar en Barcelona para celebrar momentos especiales con amigos o familiares, Antúnez es, sin duda, una opción que no decepciona. ¡Esperamos con ansias nuestra próxima reunión!

Excelente servicio y comida. He ido varias veces y el personal siempre ha sido amable.

Es un lugar muy agradable para estar un rato

Un buen sitio para cenar, la tortilla de patata y el tataki lo mejor de la carta. Precio excesivo por lo que prefieren.

Muy buena comida y un servicio excelente, sobretodo por parte de Ana, súper profesional y amable😊

Súper trankilo, muy buen ambiente

Increible experiencia! Comida muy rica. Me encanto el canellon de pato! Volveré