Alambí - Hotel Hesperia Sant Just en Sant Just Desvern

El servicio es muy bueno y muy conveniente. Puede programar una cita para el traslado al aeropuerto por la mañana.

Cómodo y bien situado, pero un poco ruidoso (ligeramente, no impide el sueño) bien por la carretera, o bien por el gimnasio, que empieza pronto con la música (sobre las 7). Recomendable en cualquier caso

Excelente relación calidad precio. Moderno. Buen desayuno. Buen gimnasio. No hay piscina.

Excelente estancia en este hotel. El personal increíble, el servicio increíble, la comida increíble. Volvería en un abrir y cerrar de ojos.

Uno de los mejores hoteles de Barcelona. El personal de recepción es increíble, siempre dispuesto a ayudar; y sobre todo el pianista: es un pianista increíble, un tipo muy majo.

Hace poco me alojé en este hotel por un viaje de negocios, lo elegí porque estaba cerca del trabajo. Me impresionó el servicio excepcional. Todos los días iba a desayunar antes del trabajo y regresaba a almorzar, y siempre recibía un nivel de atención que no había experimentado ni siquiera en hoteles de lujo de alta gama en los últimos cinco años. Especialmente había una señora allí, Débora, que siempre estaba presente en el restaurante. Recordaba constantemente mi nombre y me hablaba como si nos conociéramos desde hacía años, haciendo que cada interacción fuera cálida y personal. Incluso recordó mis preferencias alimentarias. Me sentí VIP, similar a la atención personalizada que uno experimenta en clase ejecutiva en un vuelo 👍 Mi habitación estaba bien/normal. Algunas mañanas, la ducha tardaba un poco en calentarse, lo cual era un pequeño inconveniente. En general fue una estancia estupenda, recomiendo este lugar por la atención excepcional que recibí.

Un gran hotel si estás de paso, pero menos adecuado para un viaje a la ciudad de Barcelona. Su ubicación es conveniente para el aeropuerto, lo que lo convierte en una opción conveniente para una escala corta. Desafortunadamente, hay poco que hacer en el área inmediata y está demasiado lejos del centro para un viaje a la ciudad. El desayuno fue decepcionante: pocas opciones y no de alta calidad. Afortunadamente, la amabilidad del personal compensa mucho y en el bar reina un ambiente agradable, en parte gracias al pianista que realmente hace todo lo posible para que esto salga bien.

Extraordinaria! Una atención inigualable, en especial por parte de la recepcionista Milena, que rebosa de positividad y amabilidad al cliente, ofreciéndonos todo lo que estaba en su mano.

Hotel ideal para trabajo. Respecto a la ubicación, no está en el centro de Barcelona pero estaba cerca del lugar donde tenía que trabajar.

Hotel realmente bonito, habitaciones, bar y vestíbulo, todo muy exclusivo. Gran valor. Un poco alejado de las principales atracciones de Barcelona pero con tranvías cerca.