Abat | Lleida en Lleida

Muy buena atención y se agradece el trato amable y abierto de los trabajadores.

Visitamos este café y quedamos decepcionados. El piso estaba muy sucio, y las horquillas y las cucharas no parecían lavadas adecuadamente. La ensalada era buena y las tostadas estaban bien, pero la atmósfera la arruinó. La música ruidosa al estilo de club nocturno a las 9 a.m. de un sábado no era lo que esperábamos, y también era bastante frío por dentro. En general, la falta de limpieza y el ambiente incómodo eclipsó la comida decente.

Cafetería con buenos sándwiches, hamburguesas, tostadas, patatas, ensaladas y panqueques. El café es decente, y añaden un croissant pequeño de obsequio, que siempre es un buen detalle. Tienen zumos naturales. Muy recomendables el sándwich Salmón Lover, la Burger Trufada, los nachos, y los Nutella Pancakes. La decoración es curiosa, la amplia terraza, los dependientes son agradables (aunque no hay servicio en la mesa), tienen precios muy asequibles, y aceptan perros. Están abiertos desde la mañana hasta la noche, y la cocina funciona todo el tiempo, así que es buen sitio para cualquier comida, incluso para brunch (insisto en recomendar el Salmón Lover y los zumos naturales).

Me encanto, vine con las expectativas altas y me subieron al cielo con su bikini de salmon y sus hamburguesas de pollo, excelente servicio!!!

Buen sitio de comida rápida. Mejoraría si las fritas de boniato no fueran recalentadas.

Muy buen café. Personal detallista y muy agradable en el trato personal. De 10 a 12h y de 16 a 18h al tomar café te obsequian con un mini cruasan

La señora tuvo una actitud negativa. Seguí llenando bolsas para llevar mientras mi comida estaba lista y yo estaba allí parado con mi timbre encendido.

Me mandaron un globo con una coca de verduras y me encantó, estaba riquísima. La presentación me gustó mucho, venía con 2 piruletas. Cuando pueda repetiré en el local, tiene todo muy buena pinta.

Buen sitio para comer algo o tomar un café, buena relación calidad-precio. Tiene tablas fuera. Ambiente agradable. El único inconveniente es que debes servirte tú en la mesa y si estás en el piso de arriba tienes que subir muchas escaleras. También puedes pedir que te lo suban pero nadie lo hace.

La comida está buenísima, las patatas son una locura y las raciones grandes. El local es muy chulo y el servicio a domicilio súper correcto. Muy recomendable