A Galerna en Sada

Fuimos a comer dos adultos y una niña y estaba todo riquísimo. Comimos patacón, cachapa y arepas. Todo buenísimo. Sin duda volveremos.

Hacía mucho que no regresábamos a Sada. Los domingos solemos recorrer la comarca coruñesa para desayunar allí donde nos lleve el viento. Casualmente hoy ese viento nos hizo aterrizar en la «Galerna de Playa». Galerna es un tipo de tormenta marina repentina con mucho viento y lluvia. Pero el desayuno fue de todo menos tormentoso. Fuimos muy bien atendidos y degustamos delicias venezolanas, como el «cachito» -una especie de pan de masa dulce relleno con jamón york desmenuzado- y las «empanadas», empanadillas fritas con masa de maíz con distintos rellenos. Es notable que los cafés dobles que nos sirvieron vinieron acompañados con sus respectivos pinchos de tortilla, algo que no suele suceder en otros bares porque siempre eliminan los pinchos cuando pides algo de la carta. ¡Muy bien! Estuvimos en la terraza, que tiene vista a los veleros de la Marina de Sada.

Muy, muy bien. Éramos un grupo y en un día con mucho movimiento y no hubo ni el más mínimo fallo. Las arepas riquísimas. Las cachapas brutales. Tienen también comida española, pero no puedo decir cómo está porque siempre vamos a las arepas. Me extrañaría que no les saliera bien. La terraza está en un sitio privilegiado y con muy buenas vistas. Cocinan muy bien, son hiperamables. Qué más se puede pedir?

Visité Sada durante 3 días y todos los días he venido aquí, ya sea para tomar un café, picar algo o comer. Me han atendido mejor que en ningún sitio, las dos camareras son muy agradables y atentas. Los cafés están riquísimos. El menú del día bastante completo. Recomiendo que prueben las arepas y los postres tres leches y milhojas. Trato y servicio inmejorable.