Los mejores restaurantes con terraza de cocina vegetariana en Barcelona

24/05/2025: Mi esposa, mi hijo y yo disfrutamos de una cena encantadora en la Taverna del Clinic, que hace honor a su distinción Michelin por su buena cocina y cuenta con un personal extremadamente amable, servicial y atento. Optamos por pedir a la carta en lugar del menú degustación y quedamos muy satisfechos con nuestra elección. Seguimos un buen consejo del camarero. De entrantes pedimos croquetas de jamón, la versión del restaurante de patatas bravas (donde se piden porciones individuales; tenga en cuenta que cada una es grande) y rollitos de primavera de gambas. Los entrantes fueron paella de mariscos, bacalao al horno y un plato de costilla gallega. De postre, trufas de chocolate, tres quesos (le pedí al camarero que me sorprendiera con sus favoritos y quedé encantado con los quesos) y profiteroles rellenos de salsa de chocolate con un toque mágico. Todos los platos estaban exquisitos. Pedimos vino por copas, siguiendo las recomendaciones del camarero. Como ya hemos dicho, fue una noche maravillosa y quedamos encantados con el ambiente del restaurante (un poco más informal y exclusivo), la comida y la calidad del servicio.

15/05/2025: Muy buen restaurante. Comida, servicio, interiorismo, relación calidad/precio, lo máximo, una visita obligada en Barcelona.

27/05/2025: Fuimos un grupo en el segundo nivel, el servicio no es el más esmerado pero está opinión es desde el punto de vista de latinos, acá suelen ser muy fríos y quizás en algunos casos podría decirse poco cortes , pero tampoco fue malo, no se esmeran mucho, por otro lado, luego del pedido si hubo bastante demora en traer los platos, no son muy buenos la verdad y por el precio deberían tener mejor calidad o gusto, igual , soy peruano y el paladar algo exigente quizás. El ambiente si es bueno, buena vista.

23/05/2025: in una piazza parallela alla ramblas ci siamo fermati in questo ristorante che " prometteva" la vera paella catalana. Che si tratti di un locale abituato a grandi flussi turistici lo si è visto subito dalla freddezza e la meccanicità del personale che senza troppi fronzoli ci ha fatto accomodare senza profferire parola e lasciando due menu sul tavolo senza spiegare nulla. Dopo una discreta attesa, l ordinazione è stata velocissima e i tentativi di farci spiegare qualcosa in più sono stati vani. La paella è stata fatta al momento, almeno crediamo, visto che abbiamo atteso circa 30 minuti. Onestamente devo dire che ne ho mangiate di migliori in Italia. Il rapporto qualità prezzo...bah...non saprei !!!