Los mejores restaurantes de cocina mediterránea en Vandellòs i l'Hospitalet de l'Infant

14/07/2024: El 25 de agosto de 2023, mi esposa y yo nos hospedamos en el hotel por una noche. Aproximadamente una hora después de salir, nos dimos cuenta de que habíamos olvidado nuestros auriculares marca Beats Studio 3 Pro, valorados en 400€, en la habitación. Dos horas después, llamamos a la recepción del hotel, donde nos informaron que la señora de la limpieza había encontrado los auriculares. Posteriormente, intercambiamos varios correos electrónicos con la recepción, quienes nos confirmaron que tenían los auriculares y que serían guardados hasta nuestra próxima estadía en 2024. Sin embargo, esto no ocurrió porque el hotel estaba lleno y no pudieron recibirnos. Entonces, llamamos el viernes 12 de julio de 2024 (hablamos con la recepcionista Inés o Roxana) para informar que pasaríamos el 14 de julio de 2024 solo para recoger los auriculares, lo cual fue confirmado tanto por ellas como por los correos electrónicos que se encontraban allí. Testigo: (recepcionista Laia). Para nuestra sorpresa, hoy 14 de julio 2024, cuando pasamos por el hotel como acordado, las personas en la recepción (Laia e Nora) nos dijeron que los auriculares ya no estaban allí. Nos dieron la justificación(Chefe Rosa e recepcionista Paul) de que había pasado un año, por lo que ya no tenían los auriculares. ¡Esto es absurdo! Después de los correos electrónicos intercambiados y las llamadas realizadas, ¡me hicieron desviar mi ruta de viaje para llegar hoy y decirme que ya no tienen los auriculares! ¡Vergüenza! ¡VERGÜENZA! FUTUROS CLIENTES, TENGAN CUIDADO, NO DEJEN SUS PERTENENCIAS OLVIDADAS EN ESTE HOTEL PORQUE LOS EMPLEADOS DEL HOTEL LAS DESVIARÁN.

31/05/2024: La experiencia fue excelente. El servicio y la comida perfectos. La lubina "al orio" me encantó. Repetiría seguro. Un punto muy positivo: pudimos entrar con nuestra mascota.

25/08/2024: Visita a L'Hospitalet de l'Infant sin planificar. Es sábado, hora de cenar y no hemos reservado. Nos acercamos a este restaurante, y nos permiten sentarnos. Sorprende que no esté lleno pues su ubicación es privilegiada. La carta es muy corta y la de vinos también. Pedimos un poco de jamón ibérico y una parrillada de pescado. No nos defraudan, ambos superan nuestras expectativas. Lástima que la oferta de vinos sea tan precaria. Pero bueno, sólo por cenar frente al mar merece la pena una visita.