Los mejores restaurantes con terraza de cocina mediterránea en Tossa de Mar

25/04/2025: Fuimos a comer menú 2 días seguidos, los chipirones y mejillones y fideua la paella no nos gustó tanto, pero todo bien.

22/04/2025: Mejillones a la brasa y tiramisú de primera. Cálida bienvenida excepto por un servidor muy, muy frío.

01/05/2025: Comida muy buena , camareros muy amables y lugar espectacular.

22/04/2025: ¿Por dónde empiezo? Hicimos reserva para 4 personas más un perro. Admito que llegamos tarde lo cual fue culpa nuestra (14 en vez de 13:30). Al llegar, no tenían la mitad de las cosas que ofrecían en la carta. La única opción a parte de verduras, calamares y patatas era cerdo y marisco (no como ninguna de las dos cosas) y el camarero me trató como si fuera culpa mía no querer nada de lo que me ofrecía. Al preguntarle entre dos opciones se limitó a decir: a mi no me gusta nada de eso. Mi pareja pidió tarde un secreto y en vez de avisarnos que saldría con mucho retraso nos hicieron esperar 20 minutos más por la carne. En ese tiempo pedimos un pan que nunca llegó. Lo peor no está solo en lo carísimo que son las raciones por el tamaño que tienen ni que el servicio fuera lento y como poco, nada alentador y 0 comercial. Lo peor es que el perro con el que íbamos se nos escapó (deben ir con correa, me avisaron una vez y se la puse, pero la segunda ya estábamos en la playa y simplemente salió corriendo detrás de mí, no es una cosa que pudiera controlar). Y lo que parece ser el gerente me amenaza diciéndome “ya te lo he dicho una vez, como te lo tenga que repetir hay un cartel ahí arriba que pone que no se admiten perros, y eso que soy muy dog friendly “. 1. No creo que sean las maneras, amenazar a un cliente. 2. Si no quieres perros, no los aceptes. No te llenes la boca diciendo que eres dog friendly y luego no entiendes como se comportan los perros. 3. Mejora tu servicio, hazles más comerciales. No puede ser que tu camarero me diga que no le gustan tus platos con cara de asco, y si pido algo, nunca me lo traigan. 4. Hay que ser más humildes y saber que si un plato va a tardar lo mejor es avisar a tu cliente. Por no hablar de los precios. Hay mil lugares mucho mejores en la costa catalana, más baratos y con mucho mejores servicio. No suelo escribir malas reseñas pero es que está de verdad que lo merecía.