Los mejores restaurantes de cocina mediterránea en Cànoves i Samalús

07/11/2025: Ha sido una experiencia de lujo y exclusividad en un entorno absolutamente mágico. Alojarse en una masía catalana con más de mil años de historia, restaurada con un gusto exquisito, es un verdadero privilegio. Cada detalle está pensado para el confort y el disfrute, desde las elegantes habitaciones hasta las impresionantes zonas comunes. Las vistas desde el hotel, inmerso en el Parque Natural del Montseny, son sencillamente espectaculares, un remanso de paz que te conecta con la naturaleza. La propuesta gastronómica de su restaurante eleva la estancia a otro nivel, una delicia para los sentidos. Sin duda, el Hotel Can Cuch es un tesoro escondido, perfecto para una escapada romántica o una celebración especial donde buscas la excelencia.

28/10/2025: Precioso hotel en plena naturaleza, tranquilidad absoluta y habitaciones preciosas y cómodas

16/11/2025: Todo muy bueno y el excelente servicio. Perfecto para almuerzos familiares o desayunos de tenedor. El meloso de ternera espectacular. 🤤 Y las tartas de postre también 😋

15/11/2025: Lugar adecuado, momento adecuado. Trato cercano. Siempre hemos sido muy bien atendidos y la comida de calidad, pero hoy la tortilla de rebozuelos recién cogidos nos obliga a finalmente hacer la reseña. Sin palabras.

21/06/2025: Nos hicieron un sitio a pesar de estar completos y no tener reserva porque habíamos llegado andando. Comida espectacular!!

25/05/2025: ❌ Experiencia decepcionante, especialmente estando embarazada ❌ Reservamos en este restaurante atraídos por su menú cerrado y la posibilidad de opciones veganas y vegetarianas. Avisé con antelación por teléfono y WhatsApp que estoy Embarazada, y pedí que por favor adaptaran los entrantes (sin crudos, embutidos, patés, etc.). Me dijeron que no me preocupara, que se adaptaban sin problema. Al llegar, volví a avisar que estaba embarazada, y aun así me sirven de primer entrante un paté. Les indico que no puedo comerlo y me responden con un: “sí que puedes comerlo, tranquila”. No lo toqué. El segundo entrante fue provolone con sobrasada. Vuelvo a pedir amablemente un cambio, y me contestan con un seco: “pues ahora lo tendré que tirar…”. La alternativa: una tostadita con… sobrasada otra vez. Sin palabras. Luego me traen una albóndiga tipo bistec completamente cruda por dentro, otro riesgo innecesario y evitable. En resumen: muy mala atención a mi estado y ninguna adaptación real, a pesar de haberlo avisado por duplicado y de que me aseguraron que había opciones. Y por si fuera poco, mi pareja pidió el chuletón tomahawk con suplemento, que normalmente enseñan a los comensales antes de cocinarlo (lo vimos hacerlo con otras mesas), pero a nosotros ni siquiera nos lo enseñaron. Un detalle más que refleja la falta de cuidado y atención durante toda la experiencia. 💸 Pagamos 100€ los dos por un menú mal gestionado, poco empático y con una actitud que deja mucho que desear. No lo recomiendo, especialmente si estás embarazada o tienes alguna necesidad alimentaria concreta. Una gran decepción.