Los mejores restaurantes en Cabanillas del Campo

12/11/2025: Bocadillos muy buenos,tortillas de patata caseras y variadas, productos de la tierra....y cervezas personalizadas y muy fresquitas.....sensacional

20/08/2025: Muchos productos regionales de alta calidad! Excelente servicio ⭐️⭐️⭐️⭐️⭐️

25/10/2025: Genial, se come fenomenal y la atención estupenda. Mega recomendables los torreznos. Abren los sábados, pese a que en Google salga que no

13/09/2025: Bar Rte de polígono, desayunos, bocatas, menú, buen tamaño, ruidoso y no el más barato para almorzar

01/08/2025: Buen sitio, buena precio,buena atención

23/05/2025: No comí, a partir de las 13.30!!! el aseo estaba hecho 1 asco, no vuelvo

08/11/2025: Estoy yendo los sábados a desayunar y decir que las tostadas son de 10, el café es superrico y la tortilla de patata está exquisita, todo unido a un trato especial de los trabajadores Enhorabuena

23/10/2025: Muy buen cocido, muy abundante cantidad y muy rico

25/01/2025: Restaurante de polígono con menú del día bueno y a buen precio

16/12/2024: Muy buena comida de menú 13€ y sales muy contento. A elegir entre postre o café

06/09/2025: Fantástico se come de lujo y el personal encantador. Voy siempre que puedo

05/05/2025: Buen sitio al que ir a comer o tomarte unas cañas/copas, el personal super simpático

20/09/2025: Menú del día de calidad , todo muy rico y muy buena atención

04/08/2025: Para el café o el menú diario está bien…resultón

30/08/2025: Comimos el menú del día y estaba bien comimos lasaña de primero patatas con setas y chuleta de cerdo con patatas y ensalada , postre casero pudin con nata y arroz con leche agua vino casera 12 pavos me pareció muy bien el precio y la comida .

23/07/2025: “Del arte de comer con deshonra en el polígono del espanto” Con el cuerpo molido de fatiga y el alma hambrienta de consuelo, emprendimos aventura hacia un paraje que ni Dante en sus círculos osó describir: el polígono de Cabanillas del Campo, hediondo y más sucio que confesionario de usurero. Allí, entre naves de metal y rótulos deslucidos, se alzaba el templo del desencanto: Las Tinajas —aunque más bien parecían cubos de basura mal disimulados. A la entrada, ni Cristo ni camarero, sólo una barra desierta como honestidad en corte real. Tuvimos que importunar como acreedor a moroso hasta que, por caridad más que por cortesía, se nos indicó que el salón reposaba en las alturas. Subimos, pues, las escaleras como mártires al patíbulo, y al franquear la puerta, hallamos un páramo gélido más propio de invernadero de focas que de recinto para humanos. Los pocos comensales, cuatro almas en pena desperdigadas, tiritaban como vírgenes en el infierno. Con estómago vacío y esperanza menguada, dimos inicio al sacrificio. De primero, una paella que más bien era osario: almejas sin carne, pollo con más hueso que honra tiene un cortesano, y arroz que lloraba su falta de gracia. Mi compañero, temerario y sin temor a la muerte, pidió un plato de polvo de ajo con champiñón de lata, probablemente cosechado cuando Franco aún jugaba al escondite. Mas no contentos con este ultraje, abordamos los segundos. Pedí salmón a la mantequilla, aunque sólo vino el salmón, y tan seco que podía usarse de esponja abrasiva. Lo acompañaban cinco tristes patatas congeladas, colocadas como si las hubiese arrojado un niño ciego, y una ensalada tan mustia que parecía haber sido recolectada por monjes cistercienses en época de peste. El tomate, que en el mundo suele ser noble, en este plato lloraba vinagre desde su pulpa: ya avinagrado de cuna. Del postre... ¡ay, del postre! Un contesa de esas que hacen patria en los congeladores del infierno, dura como la moral del clero y tan industrial que parecía haber sido fabricada por el mismo demonio en la cadena de montaje. Las natillas, por su parte, revivieron a mi abuela de su descanso eterno, sólo para que pudiera maldecir al cocinero con justicia celestial. Y así, concluyó nuestro suplicio. Lo mejor de la cena fue, sin duda, la huida. Salimos por donde entramos, mas no como hombres saciados, sino como supervivientes de una guerra sin honor. Veredicto final: Restaurante Las Tinajas: donde el hambre no se sacia, el paladar se suicida y el alma suplica por el olvido. No es comer... es una penitencia sin indulgencia.

24/11/2025: Situado en el centro al lado del ayuntamiento. Trato del personal correcto. El menú del día, muy básico.... La ensaladilla estaba buena.

17/11/2025: Desayuno,correcto. Precios bien.

08/10/2025: Es un bar pequeñito de urbanización,la joven que atiende la barra es encantadora,desayuno muy rico,buen café,mucho sitio para aparcar,nos gustó

17/08/2025: Típico bar de pueblo donde puedes tomarte unas cervezas con los paisanos del lugar, el resto es correcto y los precios también, el trato del personal también es correcto.

02/11/2025: Lamentable los durum, vinieron sin apenas carne, eran mixtos y solo llevaban ternera, muchísima lechuga y cebolla y una mini rodaja de tomate. Pedimos 3 menús, nos llegaron solo 2 de patatas, la atención telefónica fue nefasta. Experiencia lamentable la verdad.

20/10/2025: El que toma pedidos fatal, te habla mal, ni te dice ni cuanto es, ni que bebida quieres. No es la primera vez que me lo hace. Y encima el kebab con sabor a cartón. No pido más

03/11/2025: Gasolinera que no dispone de túnel de lavado y además funcionamiento deficiente del aire para hinchar neumáticos

05/09/2025: Ai una mujer k se llama rakel que tratar mui mal... Con la gente k kiere trabajar y esa mujer es mui mala trabajando, deberían de hecharla