Descubre el mejor restaurante de cocina griega en Prades

14/01/2025: Fuimos a comer el domingo, solo había menú a elegir y de la poca variedad que había para elegir no les quedaban varios ingredientes, no tenían patatas fritas, tampoco les quedaba una variedad de canelones, un postre y una salsa de un postre, todos los platos eran muy minimalistas y traían poca cantidad. Los canelones estaban buenos, aunque he echado en falta que la salsa de bechamel fuera "normal" ya que solo se podía elegir con salsa de setas o salsa de mango (aunque eso ya va más a gustos). De segundo he pedido una longaniza con patatas fritas, la longaniza estaba buena pero me ha parecido muy normalita y pequeña, tenía el grosor casi de mi dedo, para ser una brasería no me esperaba un plato tan pequeño y vacío y las patatas eran minis y les faltaba cocinar un poco, estaban duras. De postre he pedido pastel de avellana y estaba bastante bueno, la única pega que le pongo al postre es que eran tres trozos del tamaño de una moneda de 2 euros. A parte de esto el servicio me ha parecido bastante lento, sobre todo con las pocas mesas que hay en el establecimiento. En conclusión, me ha decepcionado bastante y sobretodo teniendo en cuenta que el restaurante se anuncia como una brasería y solo hemos encontrado un menú cerrado, no había una carta de carnes ni variedad, 28 euros de menú por lo ofrecido lo veo muy caro.

12/01/2025: Muy decepcionado, han cambiado de dueño y ya no es lo que era, ha perdido toda su esencia. Hacía varios años que no pasaba por allí a comer, y hoy con mucha ilusión hemos reservado mesa para comer allí, recordando las ricas carnes a la brasa que comiamos en ese restaurante. Al entrar nos damos cuenta que han cambiado de dueño y ya no está el señor que lo llevaba antes, ahora hay dos chicas haciendose cargo del restaurante. Aún así decidimos darle una oportunidad y entrar. Nada más entrar nos ofrecen el menú y nos damos cuenta que ya no hay una carta como había antes en la cual podías encontrar gran variedad de carnes a la brasa. Además el menú, ya no es un menú de brasería (como su nombre indica), si no que es un menú con enfoque a restaurante moderno y minimalista, el cuál nos ha decepcionado muchísimo. El precio para la cantidad de comida que te ponen es exageradamente alto (28 euros el menú) Y para colmo, con lo reducidos que eran los platos del menú, les faltaban la mitad. (fuimos a comer a las 13:50). El servicio aparte de ser muy lento, fue muy seco y prácticamente no intercambiaron palabras con nosotros.. La verdad al igual que hace unos años recomendaba este restaurante a todo el mundo que conocía, a día de hoy no se lo puedo recomendar a nadie, y nosotros mismos no volveremos.