¡Waska! en Vitoria-Gasteiz

me veo en la obligación de colgar esta reseña porque sigo soñando con las croquetas de txistorra y con el mollete de pulled pork… además, el trato y el ambiente son inmejorables. para repetir mil veces

Le preguntamos a la camarera por el pincho estrella de Pastrami y no lo conocía. Luego se inventó que no lo tenían. El resto de pintxos nada del otro jueves.

Paramos a comer unas raciones el pasado viernes de camino a nuestro destino de vacaciones. Muy rico todo, y la camarera un encanto. Fue una parada express pero nos vamos con buen recuerdo.

Menú del día: delicioso y barato

Buenos pintxos, ricas croquetas, tortilla etc. y muy buena oferta de vinos. Para tomar un café por la mañana o un aperitivo con picoteo tanto en la barra, en la agradable zona del bar o en la terraza que da una calle peatonal. Para comer el excelente y variado menú del día en el bonito comedor es mejor reservar. No he probado las ostras pero sí las zamburiñas y las rabas. Combinan lo tradicional con toques de cocina fusión. Muy buena atención.

Pues hemos encontrado el sitio por casualidad, y la verdad que ha sido una grata experiencia en el centro de Vitoria.. hemos optado al mediodía dia a raciones buenísimas de tomate con bonito, rabas , ensaladilla buenísima...Servicio muy bueno y una terraza mas tranquila que la calle cuchi.Recomendable 100%

Muy buena experiencia en el Waska. Comida rica y de buena calidad, servicio impecable. Estuvimos un grupo con diferentes necesidades e intolerancias (personas vegetarianas, otras sin lactosa..) y adaptaron el menú perfectamente a cada comensal. Volveremos seguro.

Nuestra experiencia fue la siguiente: Preguntamos por la carta, puesto que a una de nosotras no le convencía el menú. Muy amablemente, el chico que nos atendió nos dijo que nos podían cambiar los platos, pero no tenían carta, a lo que nos pareció bien modificar un poco el menú. Nuestra sorpresa fue al final, en la cuenta, cuando vimos que nos cobraron todo al precio de carta, que no tenían, en vez del precio del menú. La comida fue del gusto de los demás comensales, menos por mi segundo, que fueron las cocochas de bacalao, que no estuvieron para nada a la altura... Los primeros, unas croquetitas, una crema, una ensalada de tomate con bonito y un risotto que estaba en el menú, para los cuatro, y los segundos que, repito, estuvieron bien, exceptuando el mío. Sin embargo, todos nos sorprendimos con la cuenta cuando llegó, puesto que en ningún momento nos enseñó ni comunicó los precios de nada o que ya no seria entonces menú; supusimos sería el precio del menú o del menú fin de semana como mucho. Y a lo que me responde este señor en mi comentario, no da una, yo no le conozco para nada, por lo tanto, no tengo por qué saberme su nombre. Es la primera vez que voy a ese local y, por supuesto, la última, y más después de su respuesta, que en vez de disculparse por el malentendido o mal comunicado por su parte, aún se jacta de servicio premium ¿Se refiere a ofrecernos menos por más?

Visité este restaurante dos veces, la comida es fantástica, el ambiente es justo, y los precios razonables. Este restaurante está recomendado para personas con enfermedad celíaca debido a la ausencia de harina y derivados en el 95 % de su carta. En el bar podrá disfrutar de pintxos y tapas, ostras francesas y almejas gallegas, almejas de afeitar y vieiras, y deliciosa croqueta casera de jamón ibérico. Es administrado por el propietario Carlos que también es el chef.

Buena opción en Vitoria, el Tataki riquísimo, la atención del personal fue excelente, el local es tranquilo y se puede disfrutar de la comida.