Vito's en Mijas

Amplio apartamento con habitaciones grandes, buenos precios y mucho espacio de almacenamiento. Fuimos allí durante la temporada extra por unos días por lo que no pudimos disfrutar de la piscina ni de otras comodidades. Hacía un poco de frío a finales de octubre, pero tenían aire acondicionado y calentadores eléctricos en cada habitación.

Un alojamiento cuidado con amplios apartamentos. Cocina propia con frigoríficos, si es necesario, autosuficiencia en la lucha contra el hambre. Aproximadamente un kilómetro hasta las tiendas, 500 m hasta las tiendas de alimentación más cercanas y aproximadamente 1,5 kN hasta la playa. La zona del hotel está limpia y bien mantenida. La zona de la piscina del hotel es bonita y tranquila. El hotel no ofrece servicios de catering. La bomba de calor de aire del apartamento enfría bien la sala de estar y la cocina, pero presenta dificultades para enfriar los dormitorios. Aparcamiento gratuito en la calle, que a veces hay que buscar cerca.

Todo excelente. Pero si tuviera que poner algún inconveniente… sería: que para ir con un carrito de bebé, para acceder al apartamento hay muchas escaleras… Ya podrían poner algún ascensor, o montacargas. Para ir a la piscina, con las rampas, de 10.

Residencia bastante antigua, pero que cuenta con una bonita piscina. No me gustó el alojamiento que requiere una renovación importante y más modernización.

Estábamos con la familia. Todo está bien, pero ya pide actualización. La piscina ahorra muchas cosas, está realmente bien, limpia y ordenada. Las camas eran cómodas. Aunque los electrodomésticos son viejos, funcionan (nosotros utilizamos la lavadora y el frigorífico). Amplia terraza con muebles (plástico). Hay más de un kilómetro desde la montaña hasta la playa, y desde la playa cuesta arriba... Hay un gimnasio, no te prepararás para los Juegos Olímpicos, pero el ejercicio definitivamente será suficiente; )

Pues acabamos de salir del hotel, y he de decir que la experiencia ha sido agridulce. Por un lado el recinto está muy bien, muy familiar, los apartamentos muy grandes y equipados con prácticamente lo que necesitas para descansar y desconectar. El problema en nuestro caso ( desconozco si el resto de apartamentos también les pasa) es que nos dieron el apartamento 32 ubicado en la planta baja del edificio donde nos encontrábamos y al estar en la planta baja hubo muchas cucarachas, sobre todo en el jardín y en las habitaciones. Con lo que las ventanas tenían que estar cerradas para evitar la entrada de insectos de este tipo, a esto se suma que el aire acondicionado solo estaba en el salón, y para colmo al encenderlo hacia un ruido horrible, así que tenias dos opciones o no dormir por el calor o no dormir por el ruido. Lo comenté en recepción y me dijeron que estaban completos y que no podían rehubicarnos. Nuestra suerte fue casi no estábamos en el apartamento. Mi recomendación es que inviertan lo necesario para sustituir todo este tipo de maquinas obsoletas además gestionar el problema de los insectos.

Teníamos un apartamento privado, de gran calidad pero todo el entorno es genial además de la piscina con socorrista. Al lado del brillante restaurante Heaven y del súper gimnasio. Muy recomendable. Paz y tranquilidad por las noches.

El estadio es enorme pero los servicios en un tipo de concierto así nefastos, colas, nada de comer y para encontrar un taxi ese día lo pasamos fatal, al final fue un Uber. No entiendo porque se quejan los taxistas si ellos no dan abasto para la gente y eventos que hay en Sevilla. Después la calle cortada y tuvimos que caminar un km para entrar al concierto. El sonido malo. Luis Miguel de cartón. Tengo claro que no volveré a un lugar tan grande a un concierto.

Fuimos a pasar un día con los amigos y la experiencia ha sido sensacional. El personal muy amable (Gorka y otro chico que había en recepción) y el socorrista también muy simpático. La piscina muy relajante y cómoda. Las habitaciones también bastante cómodas.

Mobiliario bastante antiguo. Falta mantenimiento. Horario de piscina demasiado reducido por las tardes ahora que es verano. Difícil acceso a apartamentos para personas con movilidad reducida.