06/08/2025: Can Vidal 3 no es un bar, es una institución. Lleva más de 30 años en Cerdanyola repartiendo cañas, tapas y menús del día como si no hubiera un mañana… y sin cambiar una silla desde entonces.
El local tiene ese aire de "no hemos tocado nada desde los 90" que algunos llamarían nostalgia y otros simplemente falta de reformas. Las sillas y mesas cojean con dignidad y las paredes han visto cosas. Los baños… mejor dejarlo en que no lo sabemos y quizá sea mejor así.
La cocina está en modo Schrödinger: no la ves, no sabes cómo está, pero las tapas salen ricas, calientes y rápido. El menú del día es más discreto: llena, cumple, pero no levanta pasiones. Como un capítulo flojo de una buena serie.
La camarera es un personaje en sí misma. No destaca por el trato cercano ni la simpatía, pero eso sí: sirve a la velocidad de la luz. No hay tiempo para sonrisas cuando hay tantas mesas por cubrir, y en el fondo… eso también tiene su mérito.
¿Lo mejor de todo? Siempre hay ambiente. Can Vidal 3 está lleno casi siempre, porque es barato, rápido y tiene ese aire de bar auténtico que ya no se fabrica.
Ideal para:
- Comer algo sin arruinarte.
- Escuchar conversaciones castizas de fondo.
- Sentirte parte del folclore local durante 45 minutos.
No ideal para:
- Citas románticas.
- Fans del interiorismo escandinavo.
- Personas con miedo a los baños desconocidos.
06/08/2025: Somos clientes desde hace años y ahora que todos los bares de tapas de la zona son de chinos... Solo vamos a Can Vidal, en especial cuando queremos cenar cerca de casa.
Las tapas están buenas. Los bocadillos también. En general la comida está bien y el precio es razonable. El menú del día tal vez podría mejorar.
Ahora bien, el local necesita un lavado de cara. Tal cual le hicieron al Alaska o a Cal Enric en su momento. Es uno de esos lugares que vas para estar fuera porque le temes a lo que pueda haber dentro. Los baños sin asiento ni tapa así que a hacer pipi de pie. Para los hombres fácil, pero las mujeres apreciamos un asiento limpito.
Los camareros son cordiales y atentos. La camarera va más por faena y tal vez le falta simpatía pero bueno, es eficiente.
Nosotros repetimos siempre pero, por favor, invertid un poquito ya en poner el local más acorde al single XXI.