The River Cafe en Girona

La comida en general es buena, y se tardan poco en servir, sin embargo, la atención no es buena: no saben en qué consisten sus platos, y tardan en tomar la orden sin haber entregado los menús. Cobran un monto adicional por consumir los alimentos afuera.

Botella de vino, dos copas y pasa una hora deleitándote con el ambiente.

Como cliente habitual del Restaurante River de Girona, me siento obligado a responder a determinados comentarios que, sinceramente, traspasan los límites de la crítica y entran en el terreno de la falta de respeto. He leído una opinión en la que se afirma que "la mujer encargada sólo ligaba con el camarero joven y los hombres que se sentaban en la terraza". Este tipo de afirmaciones son absolutamente inaceptables. No sólo no son ciertas, sino que constituyen un ataque personal hacia una trabajadora que simplemente realiza su trabajo. Convertir una valoración gastronómica en un juicio de carácter moral o una insinuación sobre la vida privada del personal es una falta grave de educación y de ética. El respeto debería ser la base de cualquier opinión pública, especialmente cuando se habla de personas con nombres y rostros reales. También se ha dicho que "el camarero ha pasado de nosotros e iba de listo con los turistas". Yo voy a menudo y siempre he recibido un trato profesional, amable y correcto. En horas de mucha afluencia es normal que el servicio se vea tensionado, pero de ahí a afirmar que existe desinterés o mala fe hay un abismo. No podemos confundir una espera con una falta de atención, ni una actitud natural con arrogancia. Y lo más sorprendente es criticar a un establecimiento sin haber probado ni la comida ni la bebida. Escribir una reseña negativa sin ninguna base real es, sencillamente, una injusticia y un perjuicio para un negocio que trabaja todos los días para ofrecer un buen servicio. El River es un restaurante con una trayectoria reconocida, un ambiente agradable y un equipo humano que merece respeto. Las críticas son bienvenidas cuando son constructivas, pero cuando se basan en prejuicios o insinuaciones personales, pierden toda credibilidad. Antes de escribir según qué cosas, quizás habría que recordar que detrás de cada camarero, de cada encargada y de cada local hay personas que trabajan, y que la difamación no es una opinión: es una falta grave de respeto, incluso puede ser presumiblemente un delito tipificado. Abrazo grande en el equipo del River.

Celebramos fiesta aniversario de 50 años Lugar encomiable, comida y bebida perfecta Todo el mundo encantado, muchísimas gracias Lo recomiendo

Es un sitio espectacular, con trabajadores muy majos, simpáticos y amigables, buen servicio, buena atención, y detalle. Hemos venido y nos han atendido Pau y Laia. Hemos pedido unos cocktails deliciosos!

Está bien porque está justo al lado de la Basílica de Sant Feliu. También es bueno que el servicio hable muy bien inglés y sea amable. Las bebidas llegaron muy rápido, pero eran bastante pequeñas. La comida también era muy pequeña, pero estaba muy rica. La tarta de queso estaba deliciosa, sobre todo por la salsa que le pusieron por encima. En definitiva, lo recomiendo.

La comida es muy buena y el ambiente de la terraza es genial, pero deberían formar mejor a los camareros. No levantan la cabeza ni miran las tablas: hay gente esperando más de 15 minutos hasta que algún camarero se da cuenta de que debe venir a tomar pedido. Además, el saque es muy lento. En definitiva, un pésimo servicio que desmerece la experiencia.

Comimos hamburguesa de río, bocata pepito y patatas bravas. Todo estaba riquísimo y quedamos encantados con el ambiente y el personal tan amable y acogedor. La ubicación es genial y la terraza es enorme. Sin duda volveré y recomendaré este lugar a todo aquel que viaje a Girona. 🥰

Recomiendo encarecidamente sus Pina Colada's. Tuvimos el MEJOR absoluto que hemos tenido! Teníamos nacho y ellos deliciosos. IT es un gran lugar para sentarse afuera y ver el mundo pasar. Personal encantador y amable también.

Muy acogedor y la verdad muy simpaticas todas las trabajadoras con las que traté , en especial Ainhoa que me sirvio un desayuno riquisimo