Terra Jávea Restaurante en Xàbia

Maravilloso en todos los sentidos, un lugar super bonito, cuidado hasta el más mínimo detalle con mucho gusto. Servicio muy amable y cercano. Y por último y más importante comida riquísima. Recomiendo el ceviche peruano y el rodaballo a la brasa.

Excelente opción en Jávea! Comida impecable y servicio excelente.

Personal encantador. La comida estuvo absolutamente increíble, me encantó el ceviche, la panceta, el chuletón y la tarta de manzana, simplemente espectacular. Una auténtica joya en Jávea.

El ceviche auténtico y el tataki de atún estaban increíbles. Después pedimos un pescado a la plancha; toda la comida estaba exquisita y el servicio fue excelente. ¡Tuvimos una cena maravillosa!

Un lugar muy bonito, la comida buenísima y el servicio muy bien también

Este es un tesoro escondido en Jávea. La comida estaba riquísima y el servicio, impecable. Tenemos una casa en Jávea y sin duda este restaurante enriquece enormemente la oferta gastronómica de la ciudad. ¡Pruébenlo! El aperitivo de bacalao estaba buenísimo y el chuletón tomahawk, delicioso. Ofrece platos bastante diferentes a los de otros restaurantes. Soy neoyorquino y les recomiendo que lo prueben. El médico viajero

Regresamos con mi hermana y Alfonso.

Comida muy rica, pero no barata. Excelente ubicación.

Comida rica y personal muy atento y agradable.

Dos comidas fabulosas el jueves y el sábado de esta semana. Una presentación absolutamente maravillosa, comida deliciosa. La lubina para compartir estaba espectacular. La ensalada tailandesa de carne estaba de ensueño, y el chuletón a la parrilla (con hueso) estaba exquisito. La piña a la parrilla con helado de coco, la tartaleta de chocolate con almendras y la tarta tatin "original" estaban para chuparse los dedos. Obviamente, el personal de cocina ya había hecho maravillas, pero todo el personal de recepción fue simplemente muy amable y acogedor. Carlos (en particular) fue atento, agradable y servicial, e hizo que toda la experiencia fuera especial. Sugirió vinos apropiados, sin dejar de recorrer la carta hasta encontrar botellas de precio elevado. Compartiendo nuestra pasión por el fútbol y Oasis, se tomó su tiempo para charlar, sin descuidar las demás mesas. En definitiva, probablemente una de las mejores experiencias en un restaurante... y eso es mucho decir.