Taste 1973 Restaurant en Arona

Maravillosa experiencia culinaria. Lo único negativo de la experiencia con el servicio de vinos fue muy decepcionante. El sommelier nos ofreció dos copas que no fueron de nuestro agrado, algo que comunicamos de inmediato. Posteriormente, sin que lo solicitáramos, nos trajo otro vino elegido por él que tampoco llegamos a consumir. A pesar de haber expresado claramente que no nos gustaban los vinos y de no haberlos bebido, se nos cobraron más de 30€. Consideró que esto no es un práctica correcta ni acorde a un servicio profesional. Una lástima, porque este tipo de situaciones empañan la experiencia general del restaurante.

Mi segunda vez en Taste 1973 —la primera fue en verano— y hoy por fin dejo mi reseña porque he confirmado que no fue casualidad: este restaurante realmente merece la pena. La calidad del producto es extraordinaria y el cuidado con el que lo tratan se nota en cada bocado. La atención del equipo de sala es impecable: cercana, profesional y con un nivel de detalle que eleva la experiencia. Me encanta el toque de las tarjetas ilustradas en acuarelas que acompañan los platos, explicando su historia y el porqué de cada creación. Se percibe claramente el trabajo de fondo de un gran equipo que no se ve, pero que está detrás de que todo tenga sentido. Nosotros hicimos un juego con ellas lo cual potenció más nuestra experiencia, porque así lo definiría : una experiencia 360 😆 Sin duda, un lugar al que quiero volver y seguir disfrutando. Mención especial a TODOS! Los gallegos amenazan con volver !

Una experiencia excepcional acompañada de la amabilidad del personal.

Este merecido restaurante de 1 estrella está maravillosamente ubicado dentro del hotel Villa Cortés. Pocas mesas ofrecen una experiencia íntima. Fuimos allí para descubrir la cocina canaria y maridarla con vinos locales. ¡Fantástico! El chef acompaña cada plato con una bonita postal, en cuyo reverso encontrarás una pequeña anécdota local en francés relacionada con el plato. Recuerda reservar con mucha antelación porque esta experiencia realmente merece la pena.

Nuestra cena en Taste 1973 fue una experiencia extraordinaria. Acompañados de una o dos copas de vino, disfrutamos del menú "Roque de Arona Hío" con 13 platos excepcionales, presentado con pasión por el gran equipo de Diego. Fue un viaje culinario por las Islas Canarias, con explicaciones detalladas del equipo sobre el origen de los productos y tarjetas de presentación con un diseño precioso para llevar a casa, que te cuentan aún más sobre la cultura y la historia de las islas. La comida en sí era excelente, con una amplia variedad de pescados, carnes, opciones vegetarianas y dulces exquisitos. Rara vez me sentí simplemente satisfecho; más bien, casi todos los platos eran tan deliciosos que me dieron ganas de cerrar los ojos y soñar. En serio, en algunos momentos (como con el atún) estuve a punto de llorar; la cocina era ASÍ de buena. La presentación de los platos fue variada y elegante, sin intentar ser demasiado elaborada. No quiero desvelar detalles, pero la selección de quesos, las mignardises y la cata de vinos de la Geria de Lanzarote estuvieron entre los (no solo) momentos visuales más destacados. El equipo nos entretuvo fantásticamente durante más de 4 horas. Nada fue demasiado lento, nada se sintió apresurado, mantuvieron el ritmo perfecto para una velada magistralmente organizada. También nos encantó la vista panorámica de la cocina. Nos impresionó mucho la calma y la serenidad con la que se desarrolló toda la magia. El saludo personal del cglücksgefühlehef al final de la velada culminó nuestra cena a la perfección. Y el delicioso regalo de cumpleaños, que mi esposa y yo seguimos disfrutando al día siguiente, fue la guinda del pastel. Gracias también por eso. Nos preguntaron cómo el equipo podría mejorar aún más. Y aunque aprecio el deseo de seguir mejorando, en ese momento no tenía una respuesta. Y todavía me resulta difícil. Taste 1973 cumple en todos los aspectos: comida, servicio, presentación, ambiente y su conexión con la cultura canaria. Una velada en Taste 1973 es mucho más que una cena: es gastronomía, historia y entretenimiento. Horas llenas de momentos felices inolvidables. ¡Bravo y mucho éxito a todo el equipo!

Servicio muy amable y de buena calidad. Recorrido histórico y gastronómico informativo por toda Tenerife.

Este lugar es increíble. Todo el viaje desde el comienzo de la comida hasta el final es solo algo especial. No quiero arruinar ninguna sorpresa, por eso mi reseña es tan corta. Si usted es un amante de la comida o simplemente le gusta ser entretenido con la comida, entonces este es el lugar para usted. El entorno y la atención al detalle es simplemente perfecto. El equipo es tan Recibimiento y amable que no pueden hacer lo suficiente para hacer su experiencia especial. Gracias por una comida tan memorable!

Bueno, la perfección se puede mejorar El Chef Diego continúa su trayectoria ascendente. Seguro que te espera un 2* Michelin. El entorno, el teatro del equipo de espera y el “ajetreo” de la brigada de Diego es un espectáculo digno de contemplar. Todo se hace con un estándar meticuloso. Gran valor para las obras de arte presentadas con tanto estilo. Y mi palabra el Sabor. . . . . . . . . Fantastic. Hace que mi corazón cante. Tengo que irme ahora porque me estoy poniendo bastante emocional. . . .