Star City en Arrecife

Solo le doy tres estrellas a este establecimiento, no por sus magníficas vistas, sino por el servicio, que, en mi opinión, deja mucho que desear. El personal no es muy amable. Esperamos varios minutos antes de sentarnos. Había una grave falta de mantenimiento; al llegar y al salir, había un montón de polvo, barrido y sin recoger en medio de la habitación. Una pena para un establecimiento de tan alta categoría con unas vistas increíbles y magníficas de Lanzarote.

Hoy disfrutamos de un almuerzo delicioso. Nos atendió Marti, quien fue muy amable y servicial. Cuando llegamos (a las 12:30 de un jueves), estaba bastante lleno, así que el servicio fue un poco lento, pero no fue un problema cuando te sientas en un lugar con tan buenas vistas. La comida estaba deliciosa y los precios razonables para un restaurante como este.

Vistas espectaculares de Arrecife. Servicio muy amable pero " lento". Recomendable visitarlo. Puedes comer en los horarios habituales o simplemente ir a tomar una copa en horarios de "tardeo". No te puedes perder el pasar por este sitio.

Muy buen desayuno con una vista impresionante.

Una vista estupenda, sobre todo al atardecer. La playa y toda la ciudad están iluminadas. Por desgracia: el servicio es muy lento y descuidado. Lo hemos visto tanto en nuestra mesa como en las de los vecinos: nos trajeron una botella de vino y, 15 minutos después, incluso las copas. Se olvidaron de las patatas fritas (en lugar de patatas); al final de la comida, las trajeron. No sé qué hacen mientras tanto, pero la experiencia del cliente fue muy mala. Me pregunto cómo será cuando haya más de cinco mesas llenas. Me dio la sensación de que estaban ciegos. Aun así, es un sitio genial.

Visitar hoy Blue 17 Rooftop Bar ha sido una experiencia para los sentidos, incluso en un día de calima. Las vistas son espectaculares y aportan ese toque especial que convierte una comida en un pequeño acontecimiento. La propuesta culinaria nos sorprendió gratamente por su originalidad. Comenzamos con unos huevos rotos con langostinos, combinación atrevida y sabrosa. Después llegó uno de los grandes aciertos de la jornada: un tataki de atún rojo con cogollo aliñado, tan equilibrado y fresco que no pudimos evitar repetirlo. Continuamos con un pulpo bien tratado y un plato de cochino que completó la primera parte del almuerzo. Para cerrar, dos postres: unas láminas de hojaldre crujiente y un cremoso de chocolate que cumplió su función golosa con nota. Todo ello acompañado de un Pituco, un tinto de Jumilla que maridó a la perfección con los sabores. La única sombra en la experiencia fue el servicio de sala, algo despistado y con problemas de comunicación que restaron fluidez al conjunto. Aun así, la cocina y el entorno hacen que Blue 17 sea un rincón ideal para disfrutar de una comida con vistas privilegiadas.

Es una pena que por la construcción masiva de hoteles en la isla en los últimos años, haya que importar una mano de obra sin cualificación ni académica, profesional para hostelería, menos aún para un cinco estrellas: camareros hablando entre sí o con otros clientes a voces, de una punta a otra de la cafeteria, nivel nulo deinglés, ponerte el segundo plato sin haberte levantado el plato anterior, tocarse el interior de las orejas, el pelo o la nariz mientras te toman la comanda, con las mismas manos que te sirven la comida luego... Las vistas, las mismas que diseñó el arquitecto, de lo mejor cito de la isla. El precio, correcto y adecuado a las vistas. La comida, bien, adecuada al precio. El servicio, de mal en peor, y no es un hecho aislado.

El servicio fue un poco lento, pero por lo demás, la experiencia fue fantástica. ¡Hay que visitarlo!

Vista agradable, completa o mediocre

Nos sorprendió gratamente, la comida tardaba porque no estaba congelada y calentada en microondas. Todo fresco, sabor exquisito, trato amable y las vistas espectaculares. Estamos en el hotel de enfrente y es la segunda cena que tenemos allí. Lo recomiendo.