Sonambulo en Cádiz

El restaurante es bonito y está bien ubicado. La comida estaba fantástica, de buena calidad y platos muy elaborados y creativos. Sin embargo han habido algunos detalles que no nos han gustado. Para empezar no nos han avisado cuando iban a cerrar la cocina y preguntar si deseábamos comer algo más. Además, el segundo camarero que nos atendió fue un poco déspota y con actitud altiva.

Muy buena cocina que combina platos españoles con un toque fusión, pero sin pasarse. Los ingredientes son excelentes. El salmorejo con atún es espectacular. El mejor que he probado en Andalucía (y he probado muchos). El pulpo a la Japonagallego también. Tierno y en su punto. Precios justos. ¡Felicitaciones a todo el personal! ¡Nos vemos pronto! Actualización de 2025: La calidad y la presentación de los platos han empeorado. Las raciones son menos generosas. Los precios han subido. Las fotos de la reseña son de 2024.

Llegamos aquí casi por sorpresa, porque lo habíamos encontrado en Google Maps. Intentamos llamar dos veces para reservar, pero no pudimos contactar. Aun así, decidimos probar suerte y pasar por delante. ¡Qué suerte la nuestra! Quedaba justo una mesa para dos personas, la última de la noche. Nos sorprendió gratamente la atención y el ambiente relajado y la atención cuidada, incluso a última hora, cuando en otros sitios empieza a decaer. Comenzamos compartiendo una deliciosa ensaladilla de lubina. Después disfrutamos de un cremoso risotto con carrilleras y foie, y un roast beef tierno y jugoso, ligeramente rosado por dentro y perfectamente aderezado con salsa de mostaza. Y de postre… una experiencia impresionante. Elegimos el coulant hecho al momento y fue, sin duda, el mejor postre de nuestros 15 días de vacaciones. Es más: uno de los mejores postres que hemos probado. Delicioso, elaborado con muchísimo cuidado, ingredientes fantásticos y un equilibrio perfecto. Mereció totalmente la pena esperar a que saliera recién hecho del horno: un auténtico milagro en un plato. La comida fue excelente y disfrutamos tanto que quisimos volver al día siguiente, pero ya estaba todo completo. Sin duda, un lugar muy recomendable.

Todo muy bien. Servicio, comida, ambiente, precios competitivos. Pero a mejorar el cambiar loa platos a los comensales entre uno y otros. Gracias.

Segunda visita… y hay que volver más veces. Buen producto y una cocina muy muy sugerente. Imprescindible “la torta de Inés Rosales con tartar de atún”. Buena carta de vinos. Precio acorde con producto y servicio.

Sin palabras. Todo realmente exquisito, y un servicio de la mano de David excelente. Enhorabuena!

No teníamos reserva y tuvimos suerte de conseguir mesa. Nuestro camarero nos recibió cálidamente y se mantuvo amable en todo momento. Tras comer tarde, optamos por opciones ligeras: ensalada de lubina con verduras encurtidas, mejillones en salsa arribiata (especial) y sopa de salmorejo con atún. La ensalada de lubina no fue para nada lo que esperábamos. Esperábamos una ensalada estilo ceviche, pero en su lugar nos sirvieron una montaña de ensalada de patata con unos dados pequeños de lubina por encima. Los mejillones estaban excelentes; la salsa tenía un toque picante sutil y persistente. Sin embargo, las galletas de atún, edamame y gambas de la sopa de salmorejo fueron la estrella; solo por esto volvería al restaurante. Considerando la preciosa decoración, el excelente servicio y la alta calidad de la comida, esperábamos pagar mucho más de lo habitual, pero fue sorprendentemente muy barato. Toda la experiencia fue un lujo. Un restaurante maravilloso que recomiendo.

Espectacular!! La calidad y la elaboración de 10

Atentos , buena calidad y el mejor servicio que he recibido , si te pierde d por el centro de Cadiz y te centra muchas ganas de comer, no lo dudes y acércate a este restaurante, no te arrepentirás.

Maravilla de producto y atención. Hemos estado 2 veces en este mes y seguro volveremos siempre que vayamos a Cádiz. La torta de Inés Rosales espectacular y la parpatana, tanto la de corvina como la de pargo sublimes. Y qué decir de los postres, el lingote de chocolate, el coulant y el milhojas de queso mascarpone inigualables. Gracias y repetiremos.